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Compromís acusa al PP de querer cambiar la normativa del taxi para favorecer el negocio de unos pocos a costa de precarizar el sector

    Compromís ha reclamado en las Cortes “respeto a la integridad profesional de los taxistas” valencianos frente a los ataques que el sector sufre desde la Agencia Valenciana de Movilidad, organismo dependiente de la Generalitat.

    El sector del taxi lleva más de un año en pie de guerra por la voluntad del PP de introducir una serie de cambios en la normativa que regula esta actividad cuya intención, a juicio del diputado responsable de Infraestructuras de la coalición, Juan Ponce, es que “determinadas firmas afines al partido puedan acaparar las licencias de los taxis que circulan por la Comunidad y especialmente por el área metropolitana de Valencia, acabando con un sector que se caracteriza por dar trabajo digno a un gran número de autónomos, en unas condiciones que les han permitido mantener grandes dosis de independencia, lo cual no es precisamente del gusto del PP”.

    Hasta la fecha, la normativa que regula el sector prioriza a las personas físicas –trabajadores autónomos- sobre las jurídicas –empresas o colectivos de diversa índole- en la concesión de licencias para ejercer la actividad. De esta manera se garantiza que cada titular de una licencia tenga su propio taxi, pudiendo desarrollar su labor con cierta independencia. Pero desde 2007 se ha acelerado un proceso por el cual un mismo titular ha podido conseguir gran número de licencias, precarizando el sector al contratar dicho titular a trabajadores en régimen de asalariados.

    El borrador del reglamento que ahora se encuentra en fase de exposición pública establece que un mismo titular puede acaparar hasta un 15% de las licencias expedidas en cada área funcional del taxi. Además el PP quiere modificar la jornada laboral semanal de forma que si hasta ahora un taxi debía trabajar como máximo 60 horas, a partir de la aprobación del nuevo reglamento esta cifra sería el mínimo semanal a realizar, por lo que para conservar la licencia, todo autónomo estará obligado a contratar asalariados que completen la nueva jornada. De lo contrario incurrirán en una falta administrativa por la que podrían ser multados con hasta 6.000 euros.

    En el área funcional de Valencia existen alrededor de 2.900 licencias de taxi, una cifra excesiva en la que todos coinciden que hay que reducir considerablemente, por la viabilidad del sector. Sin embargo, “el PP quiere aprovechar esta circunstancia para arrebatarle las licencias a los autónomos y sanear el negocio para después pasárselo a sus amigos y afines, como hace con todo lo que se le pone a tiro”, ha asegurado Ponce.

    Compromís ha presentado iniciativas en las Cortes valencianas para frenar las intenciones del PP y ha presentado alegaciones al borrador del reglamento.

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