Cómo cuidar tus ojos durante el invierno
Aunque haya menos horas de sol, otoño e invierno son estaciones en las que nuestros ojos también sufren por la exposición al frío y a los cambios de temperatura
Otoño e invierno son las estaciones con menos horas de luz, los rayos de sol parecen que tengan menor intensidad pero, no por ello existen excusas para olvidarnos de cuidar de nuestros ojos. Es más, según los expertos delÁrea de Salud Visual de ALAIN AFFLELOU la bajada de temperaturas y el frío contribuyen a crear ambientes más secos, propiciando, por tanto, la sequedad ocular.
Tampoco ayuda, durante las épocas más frías del año, permanecer mucho tiempo expuestos a la calefacción y el gran contraste de temperatura cuando salimos al exterior en los días de mucho frío. Pese a que los párpados y las lágrimas son aliados de los ojos para su protección natural, tenemos que tener en cuenta una serie de consejos para evitar la sequedad en los ojos y, así, proteger nuestra salud visual en esta época del año.
Consejos para evitar la sequedad en los ojos:
1. Evitar frotarnos los ojos. Si notas picor o sequedad en tus ojos, los expertos recomiendan parpadear varias veces, o bien, mantener los ojos cerrados durante unos segundos y, si es posible, utilizar lágrimas artificiales.
2. Utilizar gafas el mayor tiempo posible. Las gafas graduadas nos ayudan a mantener la temperatura y la humedad del ojo y evitar que éstos se resequen. Para aquellos que no las necesiten, es recomendable usar gafas de sol en exteriores, que nos ayudarán a proteger nuestros ojos.
3. Usar un humidificador. Es importante controlar la humedad del ambiente en el que nos encontramos ya que, en muchos casos, la sequedad de los ojos se debe al uso de la calefacción. Por ello, es recomendable tener cerca un humidificador para aliviar las molestias oculares.
4. Humedecer los ojos con cierta frecuencia. Las lágrimas artificiales son las grandes aliadas para aliviar la sequedad en los ojos o la fatiga ocular. Dos o tres gotas varias veces al día es suficiente para lubricar el ojo.
5. Realizar pequeños descansos de la vista. Como, por ejemplo, parpadear varias veces para lubricar el ojo de manera natural y descansar la vista, así como también mantener los ojos cerrados durante unos segundos.
6. Cuidar los ojos mientras realizamos actividades en el exterior. Tanto si salimos a pasear como a practicar algún deporte al aire libre como correr o montar en bicicleta, usar gafas de sol o incluso las máscaras solares envolventes nos ayudarán a proteger nuestros ojos.
En cualquier caso, se recomienda siempre acudir a un profesional de la visión si notamos cualquiera de las molestias descritas anteriormente.