Parques solares 'made in Castellón' en la 'zona cero' del desastre de Fukushima: Así dice 'adiós' Japón a la nuclear
Una empresa castellonense trabaja en el área de exclusión donde se tuvo que evacuar a la población
Una empresa energética de Castellón ha desembarcado en Japón con la construcción de parques solares en la 'zona cero' del desastre nuclear de Fukushima, el Chernobil nipón.
La instalación, la novena en el país asiático de la empresa Valfortec de la capital de la Plana se ha construido en el término de la población de Tomioka, Distrito de Futaba, Prefectura de Fukushima, servirá para generar energía limpia en una zona que se vio totalmente afectada por el accidente nuclear de Fukushima I en marzo del año 2011.
De hecho, todos los ciudadanos de la población fueron desalojados, ya que el municipio se encuentra muy próximo a lo que en su día fue la central nuclear de Fukushima I.
Aquella catástrofe provocada por un tsunami originado por un virulento terremoto hizo que el país nipón dejara de confiar plenamente en la energía nuclear y la apuesta tras aquel desastre fue clara: incentivar las energías renovables, con la solar fotovoltaica y la eólica a la cabeza.
Por ello, el despliegue que ha hecho Japón en la última década es más que destacable. En lo que respecta a energía solar fotovoltaica, el país cuenta hoy en día con algo más de 90 GW de potencia acumulada, algo destacable ya que hace una década tenía tan solo 23 GW.
El parque fotovoltaico Fukushima cuenta con una potencia de 517 kWp y tendrá una producción anual de 623.408 kWh y permitirá a los ciudadanos de los alrededores disponer de energía eficiente, sostenible y económica.
Respecto al área técnica, cabe destacar que la instalación que realizó Valfortec consta de 840 módulos de 615 Wp con un punto de conexión a la red de distribución eléctrica se localiza dentro de la misma planta de Fukushima.
Desde la propia compañía, su director general, Fidel Roig destaca que con la puesta en marcha de la planta de Fukushima “hemos llevado energía verde producida con el sol a un territorio que en 2011 fue duramente castigado por un accidente nuclear. A partir de aquel hito la balanza se decantó por las renovables”.