Greenpeace denuncia a la refinería de Castellón
Para la citada organización la quema de basuras en cementeras, como en el caso de Buñol, Alicante y Sagunto, produce emisiones muy peligrosas para la salud e incorpora la contaminación al cemento.
Por su parte, la refinería de Castellón "produce seis millones de toneladas de hidrocarburos al año, lo que supone el vertido constante de hidrocarburos al medio marino".
Además, "existe un foco de contaminación importante en Castellón por la industria cerámica, fuente de emisión de contaminantes, entre los que se encuentra el arsénico".
Según el informe "Contaminación en España", presentado hoy por la ONG ecologista Greenpeace y que incluye los datos citados, el País Vasco, Cataluña y Andalucía son las comunidades con más focos de contaminación por vertidos industriales, de residuos y petrolíferos y, a la vez, las más contaminadas.
A bordo del Arctic Sunrise, en el Muelle de España del Barcelona, Greenpeace ha iniciado con esta presentación una campaña, con el lema "¿Quién contamina?", que llevará a este barco de la organización por la costa para señalar a los principales responsables de la contaminación en España.
La responsable de la campaña, Sara del Río, ha denunciado que "la Administración es absolutamente permisiva" con los vertidos y ha reclamado "que se cree una agencia de control de la contaminación que al menos asegure que se cumple, como mínimo, la legislación comunitaria" en materia de residuos.
Julio Barea, también responsable de la campaña, ha señalado que "la connivencia entre el poder económico y el político es escandalosa, casi judicial", y ha asegurado que en España "las denuncias no van a ninguna parte" y "se contamina, pero no se paga", a diferencia de lo que ocurre en países como Francia.
La organización ecologista denuncia con esta campaña que la contaminación del medio ambiente es el resultado de políticas industriales, de residuos y de transporte muy laxas y cómplices con la industria.
En la rueda de prensa, se ha recordado que en España el 100% de la restauración de suelos contaminados se sufraga con fondos públicos, frente al 7% de Francia, o que descontaminar el Ebro de los vertidos de sustancias peligrosas efectuados durante más de un siglo por Ercros en Flix costará 200 millones, de los que la empresa "va a pagar muy poco".
Sara del Río ha situado 25 puntos negros en el País Vasco, 19 focos de contaminación en Cataluña y 15 en Andalucía, y ha señalado, como hace el informe, la coincidencia entre las comunidades con más focos contaminantes y las que tienen una mayor incidencia de cáncer, como revelan los Atlas Epidemiológicos de la Universidad Pompeu Fabra y del Instituto de Salud Carlos III.
"Contaminación en España" recopila la información que existe sobre este tema e incluye también mapas por comunidades autónomas y por los tres sectores más contaminantes: industria, residuos y petróleo, y un listado de los principales focos de contaminación.
Greenpeace ha centrado su trabajo en los tres sectores que más contribuyen a esta situación, según datos de la Agencia Europea del Medio Ambiente: la producción industrial, el vertido y tratamiento de los residuos urbanos y los hidrocarburos.
En la rueda de prensa se han comentado otros casos concretos además del de Ercros en Flix (Tarragona), como el del vertido de residuos tóxicos y radiactivos de Fertiberia y FMC-Foret en Huelva, y la situación de contaminación crónica por hidrocarburos que sufre la bahía de Algeciras, por las gasolineras flotantes en aguas de Gibraltar.
Sobre este último, Sara del Río ha manifestado su confianza en que el Foro España-Gran Bretaña-Gibraltar, que debe celebrarse próximamente, tome medidas para proteger la bahía, y ha reclamado que se legisle para que la industria petrolera tenga que asumir "todos los costes" de la contaminación por hidrocarburos que causa.
En la rueda de prensa, Greenpeace ha reclamado "un calendario de cierre de todas las incineradoras de residuos" porque generan residuos "aún más tóxicos y peligrosos", según Sara del Río, que ha denunciado que en España, principalmente en Cataluña, se está permitiendo quemar residuos en cementeras, "una práctica aún más contaminante".