Enric Nomdedéu declara por el 'caso de los sobres' y queda en las manos del jurado popular

Llega a su fin el viacrucis judicial de Enric Nomdedéu y Ali Brancal, vicealcalde y regidora del Ayuntamiento de Castellón cuando comenzó el conocido como ‘caso de los sobres’. Finalmente, y 4 años más tarde, el jurado popular decidirá en los próximos días su veredicto.

La acusación del Partido Popular pide para ellos penas de hasta 3 años de prisión por malversación de fondos públicos, mientras que la Fiscalía demanda su absolución al considerar que los acusados no eran conocedores del envío de propaganda. Además, desde el PP piden para Nomdedéu 3 años más e inhabilitación especial por falsedad documental al negar los hechos. También ha acudido como acusado Miquel Torres, asesor de la formación valencianista en aquel momento.

Todo comenzó en 2018, cuando, ya en la oposición, el Partido Popular de Castellón (PPCS) denunció a Nomdedéu y Brancal por enviar supuestamente propaganda electoral para las elecciones europeas de 2014 en sobres donde únicamente debería de ir el boletín de información municipal que remitían los grupos políticos a quienes lo solicitaban.

Además, se pedía responsabilidad por el perjuicio económico causado al Ayuntamiento, por el franqueo de los sobres, una cuantía que el consistorio no ha decidido reclamar basándose en un informe municipal donde se indica que “no se puede concretar el gasto”. Hay que recordar que el PPCS también ha pedido al Ayuntamiento que lo reclamase, por lo que la actual alcaldesa, Amparo Marco, ha tenido también que comparecer como testigo.

14 ó 15 de los sobres enviados (la cifra baila en cada declaración) fueron devueltos por Correos al no poder ser entregados a los destinatarios y llegaron a las manos del entonces teniente de alcalde, el popular Juan José Pérez Macián cuando su partido aún estaba en el poder, que los custodió durante 4 años, hasta que decidió dar el paso de denunciarlo.

Es esta la razón por la que las defensas han acusado al popular de iniciar un juicio con finalidades políticas, debido a los cargos de ambas personas. Hay que recordar que Nomdedéu ya había pasado a ostentar la secretaría autonómica de Empleo y la dirección del Labora, mientras que Brancal dimitió posteriormente al ser investigada por este caso.

Nomdedéu y Brancal han negado que participaran en la preparación de los sobres, ni que ordenaran el envío de esta propaganda para las elecciones europeas ya que estas “no eran sus funciones” y, de hecho, han asegurado que la primera vez que tuvieron conocimiento de los hechos fue cuando, cuatro años más tarde, “en un pleno municipal el señor Macián comenzó a sacar los sobres”, según ha indicado Brancal. Además, han hecho referencia a la posible adnimaversión personal contra ellos por parte del denunciante Macián y de uno de los testigos, el encargado del servicio postal municipal Carlos Limonge.

A este respecto, el actual secretario autonómico de Empleo se ha explayado contando la historia de estos antiguos colegas malavenidos en enemigos, explicando que el trato con Macián era cordial en un inicio y que “incluso le invité a mi boda y yo fui a la suya”, pero que “a raíz dar mi opinión sobre un artículo que él publicó, se molestó y rompió la relación”. A partir de ahí, la relación se fue enturbiando con hechos como el extraño caso de la aparición de un palomo muerto en el despacho de Nomdedéu o de una denuncia que interpuso contra él el propio Macián por un supuesto ataque a su derecho al honor.

Macián, por su parte, ha afirmado que “no le deseo ningún mal en lo personal, pero las responsabilidades en política se pagan”. En su relato de los hechos, ha explicado que Limonge le avisó de sus sospechas sobre el contenido de un envío de sobres (se ha hablado de cifras dispares que van desde los 300 a más de un millar) debido a que vio propaganda impresa en el despacho del grupo político y a “las prisas de Nomdedéu por enviar los sobres inmediatamente”, cosa que el propio Limonge ha negado posteriormente.

Tras la paralización del envío, el popular ha recordado una discusión con Nomdedéu, en la que “francamente airado” se lo recriminó. Siguiendo el relato de los hechos, ha expuesto que comunicó el hecho a la Junta Electoral, al tiempo que envió un requerimiento al regidor de Compromís para que confirmase que el contenido era el habitual para autorizarlo, como así se hizo.

Sin embargo, Macián asegura haber visto días antes en un perfil de redes sociales de la formación valencianista un vídeo donde se podía ver a Brancal y Nomdedéu ensobrando la propaganda electoral al tiempo que coreaban “Primavera europea; Primavera valenciana”, según ha cantado en sede judicial.

Las pruebas, sin embargo, se han esfumado. El vídeo de Facebook desapareció del perfil y el correo electrónico se perdió también en un cambio de las cuentas municipales. El caso es que, ha explicado Macián, custodió los sobres un tiempo y, con las prisas por hacer la mudanza de despacho al perder las elecciones, estos quedaron ocultos en una caja, hasta que, cuatro años más tarde, se los encontró y, viendo uno abierto, confirmó sus sospechas, por lo que decidió dar cuenta de ello.

En su paso por los juzgados Brancal y Nomdedéu han sido arropados por otros miembros de Compromís, como la secretaria de organización de la formación, Amparo Piquer, o su secretaria general Águeda Micó, que ha declarado a las puertas del juzgado que se trata de una “persecución” que forma parte de “la estrategia que sigue el PP desde hace tiempo para ponernos a todos en el mismo saco”.

A finales de la semana se prevé que el jurado popular elegido por sorteo determine el veredicto tras analizar lo argumentado por las partes. Se pondrá así conclusión a tres años de proceso un proceso judicial que llegó aarchivarse a petición de la Fiscalía en 2019 para posteriormente reabrise de nuevo a demanda del PP.