CSIF critica que la tardanza para aplicar restricciones amenaza las cárceles de Castellón
El sindicato advirtió hace una semana que el virus tenía “vías de acceso a la prisión pese al riesgo extremo que conlleva”
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) lamenta que su petición de medidas restrictivas urgentes para blindar los centros penitenciarios de Castellón ante la amenaza del COVID19, no se haya tenido en cuenta. “Ahora tenemos dos módulos en aislamiento, un curso en el origen de un brote, 8 funcionarios contagiados y más de 30 cuarantenas”, explica CSIF, que añade “que no han aplicado las medidas que pedimos y eran bastantes razonables”.
La petición llegó tras conocerse que un interno del módulo de aislamiento había dado positivo por coronavirus, siendo este el primer caso que se producía en el centro desde que comenzó la pandemia. El sindicato juzgó prioritario acotar los accesos a prisión de personas externas. Ahora, tras hacer caso omiso a esas exigencias sindicales, “las prisiones de Castellón vuelven a ser ejemplos de mala gestión y la Dirección de Albocàsser e Instituciones Penitenciarias tendrán que depurar responsabilidades” insisten.
CSIF asegura que “la desinformación que es muy habitual por parte de la dirección y pone en grave peligro la salud de los trabajadores del centro”, advierten.
En el actual escenario de estado de alarma con limitación de movimientos para la ciudadanía, CSIF ha requerido suspender todas las comunicaciones íntimas, familiares, de convivencia y locutorios. Así como anular todos los traslados, salvo por motivos sanitarios de urgencia y judiciales de carácter extraordinario.
La paralización de la actividad en los talleres productivos fue otra petición de CSIF sin atender, y ahora este brote demuestra que los talleres eran un foco potencial de entrada del COVID19.