Castelló adjudica el proyecto para reformar el Camí la Ratlla y mejorar la seguridad vial
La alcaldesa destaca la obra que está valorada en más de un millón de euros y que permitirá atender una reivindicación histórica
Las obras de mejora del Camí la Ratlla se han adjudicado por un importe de 1.118.040 euros y un plazo de ejecución de 10 meses a la UTE Camino la Ratlla, constituida por Becsa SA y Industrial de Energía y Tecnología SL. La actuación está cofinanciada con fondos europeos y está incluida en el programa de ayudas a proyectos singulares de entidades locales que favorezcan el paso a una economía baja en carbono en el marco del programa operativo del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder) de crecimiento sostenible 2014-2020.
La zona de la intervención abarca una longitud de 1,77 kilómetros y una superficie total de 16.816 metros cuadrados del Camí la Ratlla, concretamente en el tramo ubicado entre el camino Serradal y la rotonda de la CV-149. El proyecto permitirá separar el carril bici de la vía de circulación de doble sentido, mediante un parterre vegetal. Y en el lado extremo se colocará una zona de tráfico peatonal y una banda de señalización. Con ello se pretende realizar dos zonas seguras, una para bicicletas y otra para peatones, debidamente separadas de la calzada y señalizadas.
“En los próximos meses podremos ver materializado un proyecto que nos permitirá atender una reivindicación histórica y mejorar el Camí la Ratlla, dotándolo de más seguridad”, ha explicado la alcaldesa de Castelló, Amparo Marco. “La actuación prevé mejoras en la calzada y el carril bici existente y se añadirá un carril de peatones, además de más arbolado y zona verde, consolidando también la acequia”, ha detallado Marco.
En la contratación, además, se ha incorporado la perspectiva de género con el objetivo de contribuir en la medida de lo posible en el fomento de la presencia femenina en profesiones o puestos tradicionalmente ocupados de forma mayoritaria por hombres, valorando la incorporación de mujeres en el equipo de producción directamente adscrito a la ejecución de la obra. Además, la contratista se compromete a realizar un informe sobre el impacto y la repercusión que ha tenido la ejecución de la obra así como la elaboración de una presentación de carácter técnico que recogerá el impacto de las medidas adoptadas en materia de perspectiva de género.
“Avanzamos con criterios sociales como este en el camino hacia la igualdad, implicando también a las empresas que realizan proyectos de ciudad como este, que ejecutaremos desde el Ayuntamiento con ayuda de fondos europeos”, ha destacado Marco.
Junto a la perspectiva de género, otro de los criterios sociales en la adjudicación ha sido el del fomento de la creación de empleo para personas con dificultades de acceso al mercado laboral, como quienes se encuentren en situación de desempleo de tres meses como mínimo o bien sean demandantes de primer empleo; personas con discapacidad igual o superior al 33%; jóvenes de entre 18 y 25 años; perceptores de rentas mínimas de inserción; mujeres víctimas de violencia machista; y personas sin hogar en proceso de acompañamiento social por recursos públicos. Además, incluye criterios de calidad y medioambientales, como la promoción del reciclado de residuos.
Por otra parte, esta obra permitirá reducir al menos en un 5% las emisiones de CO2 respecto a la situación de partida antes de ejecutarla, cumpliendo así uno de los requisitos de los proyectos presentados a la concesión directa de subvenciones a proyectos singulares de entidades locales que favorezcan el paso a una economía baja en carbono, en el marco del programa operativo Feder de crecimiento sostenible 2014-2020, según se detalla desde la Oficina de Planificación y Proyección Económica del Ayuntamiento.