PP: “Casi 9 millones en facturas irregulares hunden a PSOE y Compromís en el caos y el descrédito”
El Grupo Municipal Popular afea al bipartito los contratos caducados o que debe de forma irregular que suponen, sólo en el Pleno de julio, casi 2 millones de euros en facturas irregulares.
El portavoz popular adjunto, Juan José Pérez Macián, recuerda que quienes dijeron que venían a normalizar la situación y se erigían en adalides de la transparencia, después de 2 años siguen suspendiendo en gestión económica: desde enero de 2016, PSOE y Compromís han comprometido 8.766.676,90 euros en facturas irregulares y sólo en lo que llevamos de año, 4.960.584,20 euros, de 361 facturas irregulares, más que en todo el 2016. Son incapaces de gestionar la adecuada contratación de servicios públicos fundamentales para la ciudad, como el alumbrado o la jardinería”.
“Llegaron para cambiarlo todo, pero su incapacidad para cumplir lo que prometieron les hunde en el caos y el descrédito”.
Macián apunta que las concejalías que más aumentan las facturas irregulares son las que gestionan la propia portavoz del gobierno, Verónica Ruiz, y el portavoz socialista, Rafa Simó.
“Los pagos irregulares, unidos al desastre en la gestión de Recursos Humanos, son razones de peso para que el concejal socialista –responsable de la Gestión Municipal y de Personal-, esté continuamente pidiendo disculpas y esté deseando tirar la toalla y abandonar el barco de la alcaldesa”.
Teatro Principal
La portavoz de los populares, Begoña Carrasco, reprocha al bipartito (PSOE y Compromís) su incapacidad para defender en Valencia a los castellonenses.
“Al rechazar nuestra moción, PSOE y Compromís permiten que se programe desde un despacho de Valencia una oferta cultural en el Teatro Principal que deja fuera a colectivos culturales, sociales y festeros de marcado carácter castellonense. Y lo hacen a pesar de que el Ayuntamiento destina 100.000 euros al Institut Valencià de Cultura, dependiente del conseller Vicent Marzá”.
“La portavoz del gobierno, y concejala de Cultura, Verónica Ruiz, quiere echar del coliseo de la Paz al teatro amateur, para reservarlo sólo a profesionales y tampoco acepta espectáculos musicales, ni otras muestras que no sean teatro en sí. Una decisión unilateral que rompe de raíz con años de tradición, lo que demuestra un desconocimiento absoluto del sentir de los ciudadanos de Castellón”.
Ante ese desprecio hacia lo castellonero; ante ese rechazo continuo a la convivencia; a la compatibilidad de actos; ante el despido de 6 trabajadores castellonenses del Instituto Valenciano de Cultura, la alcaldesa calla y otorga.
“Es una muestra más de la imposición y el sectarismo de quienes gobiernan, porque este debate no es otra cosa que una hoja de ruta nacionalista y separatista en la que no encaja otra cultura que no sea la de Compromís”.
Nadie cuestiona la exaltación de la Fallera Mayor de Valencia en el Palau de la Música. En el mismo edificio que acoge conciertos del más alto nivel, óperas, escuchar a la Filarmónica de San Petersburgo o a los niños cantores de Viena. “Parece que en Valencia sienten un mayor respeto por las tradiciones, un respeto que hoy por hoy no están demostrando con los castellonenses”, concluye Carraco.
Para revertir esta situación el Grupo Municipal Popular había presentado una iniciativa plenaria pidiendo que los 100.000€ que destina el Ayuntamiento al Instituto Valenciano de Cultura (encargado de la programación del Teatro Principal) fueran condicionados a que los colectivos sociales, culturales y festeros pudieran seguir haciendo uso del Teatro Principal, para que siguieran celebrando los actos que han venido realizando durante años en este espacio”.