Calles promete dignificar el cementerio civil en memoria de los republicanos de Castellón represaliados por el franquismo
El portavoz y candidato socialista defiende la gestión del grupo municipal socialista en el presente mandato para fomentar el espíritu de reconciliación
El portavoz socialista en el Ayuntamiento de Castellón y candidato a la alcaldía, Juan María Calles, se ha comprometido a dignificar el cementerio civil, donde reposan los restos de centenares de republicanos fusilados tras sentencias de los consejos de guerra del franquismo al final de la guerra civil de 1936-1939. Así lo ha anunciado en el transcurso de una mesa redonda sobre la Ley de la Memoria Histórica organizada por la asociación Adall.
“Las mujeres y hombres que defendieron la causa de la democracia recibieron un castigo injusto. El franquismo trató de aniquilar todos los vestigios de la República y lo hizo aplicando una represión desmesurada. La guerra castigó a los dos bandos, pero la larga posguerra fue un castigo excesivo para los vencidos. No hubo Justicia, hubo venganza”, indicó.
Calles expuso las iniciativas desarrolladas por el grupo municipal socialista de Castellón en el presente mandato para “restaurar la memoria de los republicanos”, todas ellas rechazadas por el Partido Popular. En total, se han defendido cinco mociones, tres de ellas dirigidas a que el pleno anulase los acuerdos por los que se concedieron distinciones municipales a Francisco Franco y a otros jerarcas del régimen, una para homenajear a los republicanos de Castellón asesinados en los campos de exterminio nazis y otra defender la actuación del juez Baltasar Garzón en la investigación de los crímenes de la dictadura.
“Treinta y cinco años después de la muerte de Franco, la voz de los derrotados sigue silenciada. Es el silencio de los fusilados, de los encarcelados, de los niños robados, de los depurados, de aquellos a los que se les incautaron bienes y se les amputaron los derechos a desarrollarse en libertad”, apuntó Calles, quien defendió la aprobación de la Ley de la Memoria Histórica como un paso en “el restablecimiento de la dignidad”.
“La Ley de la Memoria Histórica asume y profundiza el espíritu de reconciliación, concordia y reencuentro de los españoles durante la Transición, que tuvo su punto álgido en la Constitución de 1978. A pesar de haber sido recibida con polémica por los sectores de la sociedad menos convencidos de la revisión del pasado, tiene entre sus objetivos el de reconocer el sufrimiento y la violación de los derechos humanos que padecieron miles de españoles durante tan largo periodo”, afirma.