El Belén viviente de San José Obrero cumple 25 años
Comenzó como una sencilla representación parroquial y se ha convertido en todo un acontecimiento ciudadano, imprescindible en Navidad
El belén viviente de San José Obrero, «Misterio de Navidad», vuelve, como tantas otras citas, tras la pandemia, y vuelve para conmemorar sus 25 años ininterrumpidos en escena, pues el año pasado –aunque no hubo actores ni actrices, cantantes, decorados o luces- el auto sacramental más veterano de la ciudad llenó una de las salas de cine castellonense para ser visto en pantalla grande y entregar toda su recaudación a una causa solidaria. El próximo lunes, 13 de diciembre, se repartirán gratuitamente las entradas para las dos funciones, hasta completar aforo, en la parroquia de San José Obrero, de 20h a 22h.
Los días 16 y 17 de diciembre, a las 20h tendrán lugar las dos únicas representaciones de este año, en las cuales, a pesar de las restricciones y de la extremada prudencia con la que se van a realizar, el belén volverá al templo parroquial de los mercedarios, junto a la estación de trenes, que ya ha comenzado su transformación en una sala teatral de lo más acogedor y de una sorprendente adecuación técnica. Más de 150 personas trabajan ya para hacer realidad, un año más, las diversas escenas que narran el anuncio de la Natividad por los profetas, los desposorios de María y José y el nacimiento de Jesús de Nazaret, con la obligada adoración de los pastores y de los magos.
Este año, la asistencia –que solía superar el millar de espectadores en su tres representaciones- se verá levemente reducida por las condiciones de seguridad sanitaria y por la reducción de tres a dos funciones. Pero, a pesar de todo, el belén viviente de San José Obrero volverá como anuncio de una nueva Navidad castellonense, con la colaboración, un año más, del Ayuntamiento de Castelló, la Fundación Dávalos-Fletcher y la Diputación de Castelló.
Paco Sanz y José Edo continúan como responsables de coordinar toda la organización, junto a un equipo de 14 personas que se encargan de los actores y actrices, los y las cantantes que ambientan en directo la representación y los operarios de utilería, vestuario, tramoya, escenografía y decorados. Una legión de voluntarios amateurs que forman parte, en su mayoría, de los grupos juveniles de la parroquia y que preparan durante más de tres meses una representación que cuenta con el Premio Onda Cero.