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El Ayuntamiento estudia el proceso previo para el encauzamiento del barranco de Fraga

  • La longitud total de esta actuación supera los 8 kilómetros y cuenta con un presupuesto de más de 34 millones de euros

El vicealcalde de Castellón, Javier Moliner, ha valorado lo que supone para la ciudad la aprobación definitiva del proyecto de expropiación para la ejecución de obras de canalización en el barranco de Fraga, tema que se discutía hoy en la comisión de Desarrollo de la Ciudad.

Esta obra supone una de las más importantes para evitar los problemas de inundabilidad en la zona sur, este y oeste del término municipal de Castellón y se desarrollará a lo largo de más de 8 kilómetros que discurren, básicamente por el término municipal de Castellón, teniendo también parte de su curso en la localidad de Almassora.

Los trabajos se desarrollarán a través de lugares como la Autopista AP-7, la antigua Nacional 340, la Ronda Este, el Camí Villamargo o las instalaciones de la refinería. Esta obra, a su vez, se divide en dos fases. Una contempla el encauzamiento desde la antigua carretera Nacional 340 hasta la desembocadura al mar y otra, la conexión entre la AP-7 y la Nacional 340 donde se unirá al Canal de Desvío de Caudales de la Rambla de la Viuda.

El vicealcalde de Castellón, Javier Moliner ha declarado al respecto que “con esta obra se mejorará la capacidad de respuesta ante posibles riesgos de inundación debido a las lluvias y se mejora la calidad de vida de los vecinos que tienen su domicilio o trabajan cerca del curso del barranco de Fraga”. Moliner también ha destacado que “esta obra, supone la solución ante una de las reivindicaciones históricas que tenía la ciudad y un avance en la seguridad de una zona del término municipal que, de manera habitual, se veía afectada por los problemas puntuales originados por las avenidas de este barranco”.

El vicealcalde también ha subrayado que “el importe de licitación de esta obra supera los 34 millones de euros, lo que da una idea de la importancia de las actuaciones y del beneficio que supondrá para la ciudad de Castellón, ya que nuestra capital padece con demasiada frecuencia las consecuencias de una pluviometría irregular y los riesgos que suponen el paso de barrancos y ramblas”.

Por último, el vicealcalde de Castellón ha apuntado que “se prevén además, una serie de viales de servicio del cauce así como la reposición y remodelación de los caminos afectados”. “De esta manera -apunta Moliner- los vecinos verán como, una vez acabadas las obras, los viales no habrían sufrido desperfecto alguno y la movilidad estará garantizada”.

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