El Ayuntamiento de Castellón ahorrará más de 1,5 millones de euros en gasto energético y medio millón de kilos de CO2
El consistorio ha invertido 600.000 euros en la sustitución del alumbrado público en la avenida Capuchinos y las calles Herrero y Navarra
El Alcalde en funciones del Ayuntamiento de Castellón, Javier Moliner, ha afirmado hoy que el consistorio, gracias al plan de ahorro energético que lleva a cabo, ahorrará más de 1,5 millones de euros en gasto energético y medio millón de kilos de CO2 en beneficio de la ciudad y del medio ambiente. Moliner, quien esta mañana ha visitado las obras de sustitución de alumbrado público que se ha llevado a cabo en la avenida Capuchinos, así como en las calles Navarra y Herrero, ha destacado que estos trabajos contribuyen a mejorar el espacio urbano ya que se han sustituido las antiguas farolas por farolas más modernas y en las que ahora pueden regularse los flujos luminosos y, como consecuencia, llevar a cabo ese ahorro energético.
Moliner, quien ha estado acompañado en su comparecencia por el concejal de Sostenibilidad, Gonzalo Romero, ha destacado que la mayor parte de la ciudad ya cuenta con este tipo de farolas más modernas, por lo que el consistorio tiene capacidad para reducir el flujo luminoso en la ciudad. El Alcalde en funciones ha comentado que en la avenida Capuhinos se han sustituido 96 puntos de luz por lámparas de sodio con reguladores de flujo.
“Dentro del plan de ahorro energético, a principios del mes de septiembre se modificarán dichas regulaciones de flujos y en los polígonos industriales esa máxima intensidad se reducirá a las 22.00 horas, mientras que en el resto de la ciudad será a las 23.00 horas en lugar de a las 24.00 horas, tal y como sucede ahora”, ha comentado Moliner.
De esta forma “estaremos ahorrando el consumo de 8,5 millones de kilowatio/hora al año, es decir, ahorrando más de 1,5 millones de euros de facturación eléctrica a final de año y de 500.000 kilos de CO2”, ha comentado Moliner, quien ha destacado que se llevará a cabo, de esta forma, “una mejor eficiencia y racionalización del uso del alumbrado público que beneficia al entorno y supone un importante ahorro para la ciudad”.
También se va a llevar a cabo una reducción en el consumo de las fuentes públicos que en la actualidad son casi 40 en la ciudad y que ahora están en marcha 16 horas y se ha percibido que el disfrute no es total las 16 horas y se reducirá a 10 horas diarias y conseguimos ahorrar 10 millones kilowatio/hora. “Es un plan conjunto y cada vez hay menos alumbrados antiguos y con el nuevo horario de funcionamiento está en condiciones de ahorrar más 1,5 millones de euros”, ha destacado Moliner. Con la reducción de horarios en el funcionamiento de estas fuentes, el Ayuntamiento va a ahorrar más de 8.000 euros al mes, lo que supone unos 100.000 euros al año.