El Ayuntamiento de Castelló promoverá al cinturón verde el Parque Agrario para recuperar el 45 % de suelo degradado
El concejal de transición Ecológica presenta los estudios previos que servirán de base para diseñar el Parque Agrario de Castelló
La Concejalía de Transición Ecológica del Ayuntamiento de Castelló ha presentado hoy dos estudios previos con los cuales pretende diseñar el primer Parque Agrario de la Comunidad Valenciana en el cinturón periurbano de la ciudad, una figura que recoge la Ley de Estructuras Agrarias del Consell que prevé reactivar campos en desuso mediante la cesión o venta de terrenos por parte de sus propietarios con nuevas dinámicas agroecológicas, de soberanía alimentaria y de canales cortos de comercialización.
El regidor de Transición Ecológica, Fernando Navarro, ha explicado que el Parque Agrario es “una prioridad para este mandato” para avanzar en “un horizonte más verde y sostenible para Castelló”. Navarro ha destacado que la figura del Parque Agrario forma parte de la nueva Ley Autonómica de Estructuras Agrarias y que en este sentido “hemos recibido la voluntad de apoyo” por parte de la Generalitat Valenciana.
La intención es iniciar la activación del Parque Agrario en el entorno de la Ronda Este, donde el porcentaje de suelo degradado o en fase de degradación llega al 58% "por las expectativas urbanísticas irreales a la zona". En las próximas semanas se constituirá el Consell Agrari i de Sostenibilitat, que también tendrá como uno de los objetivos acompañar el diseño de este Parque Agrario.
Los dos estudios han sido realizados, por un lado, por Intercoop, con una radiografía del sector agrario de la ciudad y para lo cual ha recaudado la opinión de 30 agentes, entre asociaciones, comunidad de regantes, cooperativas, restaurantes, mercados, etc; y, por otra, Buscatierras ha promovido un análisis de la situación de las parcelas rústicas.
El informe de Intercoop expone como debilidades del sector la baja diversificación de cultivos, la ausencia de canales cortos de comercialización, la elevada edad mediana del agricultor, la inexistencias de foros de participación y un mala logística en la distribución de productos de proximidad.
Por su parte, el trabajo de Buscatierras pose de manifiesto que el 45% de los terrenos rústicos están una situación de abandono o semiabandono; concretamente un 18% están totalmente en desuso, el 27% en estado de degradación, el 15% es forestal y el 40% es superficie cultivada. La zona este de la ciudad es que la concentra un mayor número de parcelas abandonadas o semiabandonadas, con un 61%.