Andorra organiza la primera exposición retrospectiva de Maseda, pintor castellonense

El público andorrano tiene la oportunidad de contemplar la primera exposición retrospectiva que se realiza del artista español Maseda.  Será la galería de arte Art Lab la encargada de presentar mañana viernes en su sala de la avenida d’anclar 84, de Santa Coloma, ’Emociones convertidas en pintura’. Una exposición que podrá visitarse hasta el próximo 15 de diciembre y que espera recibir a muchos de los seguidores que Maseda ha reunido en estos años.

Y es que la muestra permite viajar por una de las carreras más meteóricas del arte contemporáneo reciente. En algo más de una década este artista nacido en Castellón ha logrado hacerse un hueco en la nueva figuración con toques urbanos. Su característico color flúor sobre negro es mucho más que una marca. Para entender los éxitos presentes hay que bucear en sus primeras pinceladas. Aunque Maseda pinta desde niño no será hasta 2005 cuando esa vocación temprana se cumpla de la mano de sus primeros maestros. Sus progresos son tan evidentes que el aprendiz pronto encuentra su sello personal en el genero del retrato. Es ahí donde nace y crece el artista. Donde se nutre de las heridas que sus personajes revelan. Para ello su mejor aliado es su calidad como dibujante. Un dibujo que con el paso del tiempo se vuelve más depurado.

Esta muestra permite descubrir cómo Maseda va sintetizando su pintura para eliminar lo superfluo. Las pinceladas se reducen y el gesto cobra todo el protagonismo. Y quien sale beneficiado de este ahorro matérico es el alma del retratado. Los años han permitido al artista captar la esencia de retratado. Y no nos referimos a un parecido fisionómico. Más bien al alma, casi siempre torturada, de quien se asoma a sus lienzos. Por eso no es de extrañar que seres tan vulnerables y con un poder de atracción como Marilyn Monroe hayan sido uno de los temas predilectos de este creador. Y Marilyn reaparece con lo último de Maseda. La experimentación técnica, el empleo del collage y la incorporación de luces de neón encuentran en la rubia eterna la modelo perfecta.

La exposición se completa con piezas donde incorpora la luz negra y la exitosa serie del Club de los 27 que Maseda ha dedicado a toda una generación que vivió deprisa y murió demasiado pronto.