Don Ramón Montero Román oficia como pregonero de la Semana Santa de Burriana

La Iglesia Parroquial del Carmen, en el Puerto de Burriana, ha acogido hoy el Pregón de Semana Santa, que por primera vez iba a coincidir con el Pregón y la Cridà de las Fallas, que han sido suspendidos por las adversas condiciones climatológicas.

El encargado de anunciar el inicio de las celebraciones religiosas de la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesucristo ha sido Ramón Montero Román y el acto se ha visto realzado con la actuación polifónica de la Coral Carnevalle, dirigida por José Ramón Calpe Saera.

Ramón Montero Román, General en la reserva de la Guardia Civil, nació en San Roque (Cádiz), el 12 de junio de 1936. Su familia llegó a la provincia de Castellón en 1945, procedente de Tarragona, cuando su padre fue destinado como teniente de la Guardia Civil a Viver. En 1952, al haber ascendido su padre a capitán, y ser destinado a Burriana, la familia se trasladó y fijó para siempre su residencia en la ciudad.

Ramón Montero ingresó en 1957 en la Academia General Militar de Zaragoza. Con el empleo de capitán desempeñó el mando en la compañía, con residencia en Burriana, desde enero de 1972 a mayo de 1974, en que ascendió a comandante. Poco después fue nombrado coronel y destinado como director de la Academia Especial de la Guardia Civil en Aranjuez (Madrid), en la que cursan sus tres últimos años de carrera los alumnos de la Escala Superior de Oficiales de la Guardia Civil. Tras su ascenso a General, se le asignó el mando de la IV Zona, con residencia en Barcelona, y en aquel momento su área de gobierno comprendía territorialmente las comunidades de Cataluña y Aragón. En junio de 1996, al cumplir la edad reglamentaria, pasó a la situación de reserva.

El pregonero ha anunciado la Semana Santa como un momento de meditación cristiana que nos predispone a la reflexión. No ha podido obviar en su discurso que se trata de una Semana Santa muy especial, ya que la mayor parte de las procesiones no se van a poder celebrar, debido a las fiestas falleras. Así, el 14 de marzo, Viernes de Pasión, desfilará por la zona del Puerto el Santísimo Cristo del Mar, para desde ese día dar todo el protagonismo a las fiestas josefinas, hasta el Jueves Santo, jornada en la que se celebrarán los Oficios y se instalarán los monumentos dedicados al Altísimo en cada una de las iglesias en la que tienen su sede las siete Cofradías y Hermandades de Burriana. El viernes por la mañana tendrá lugar la procesión a la ermita del Ecce-Homo por parte de las Cofradías del Cristo del Mar y el Santísimo Ecce-Homo, a lo largo de la cual se rezará el Vía Crucis. Por la noche todas las Hermandades participarán en la procesión del Santo Entierro. Ya el domingo de Pascua, a primera hora de la mañana, las Cofradías de la Virgen de los Dolores y el Santo Sepulcro participarán en la procesión del Santo Encuentro.

Jamás las Fallas y la Semana Santa estuvieron tan juntas. La fecha de Cremà, el 19 de marzo, es el Miércoles Santo, y sólo puede darse como fecha más cercana a la Pascua el Jueves Santo, cosa que no sucede desde 1818, y no volverá a ocurrir hasta 2285. Desde 1928, año en el que comenzaron las fallas, y también nació la primera Cofradía de Burriana, la del Santo Sepulcro, nunca habían estado tan cerca ambas celebraciones. Los años 1967, 1978 y 1989 coincidió la Cremà con el Domingo de Ramos.

Debido a esta circunstancia, este año no se celebrarán las procesiones del paso de la Oración en el Huerto, la Santa Faz, el Santísimo Ecce-Homo, Nuestra Señora de La Piedad y Nuestra Señora la Virgen de los Dolores, que todos los años reúne a miles de mujeres, y que este año coincidía con la cremà de las Fallas.

Al finalizar el acto del pregón el vicesecretario de la Junta de Hermandades, José Alfonso Peirats, ha impuesto a Ramón Montero la insignia de la Junta y le ha obsequiado con un grabado del Paso del Santo Sepulcro de Burriana, obra de Vicente Traver Calzada.

Antes, la Coral “Carnevalle”, bajo la dirección de José Ramón Calpe, ha ofrecido un concierto con un repertorio que se ha iniciado con Ay mi Dios de Pedro de Cristo; Tres motetes de Semana Santa de Tomás Luis de Victoria; Tres Corales de la Pasión según San Mateo de Johan Sebastián Bach; Ave verum Corpus de Wolgang Amadeus Mozart; y para concluir el Ave María de Tomás Luis de Victoria.