Preocupación entre los trabajadores de la residencia de Burriana por su futuro laboral: "Podría afectar al cuidado de los mayores"

Este miércoles por la mañana un grupo de trabajadores de la residencia de la tercera edad de Burriana se ha manifestado a las puertas del centro para reclamar más personal y que se ponga fin a la incertidumbre sobre su continuidad laboral a partir del 1 de enero.

“La residencia lleva tiempo trabajando bajo mínimos sacando el trabajo con cariño y esfuerzo”, aseguran, al tiempo que alertan de que el 31 de diciembre, 24 trabajadores van a acabar su contrato “lo que afectará a la calidad del cuidado que reciben los residentes”.

Desde fuentes sindicales han intentado tranquilizar a estas personas, informando de que la mayoría de personas cesadas al acabar el 2024 volverán a entrar en lista en el 2025, por lo que les señalan que les volverán a convocar, cuando comiencen los llamamientos de las vacantes de esta residencia o de la de Lledó en Castellón. 

Sin embargo, el personal de enfermería y auxiliares de enfermería pide una confirmación por escrito de Conselleria, ante el miedo y la preocupación que viven por su futuro laboral próximo, para poder organizarse de cara a las próximas semanas y saber si el número de personal se mantendrá. Asimismo, algunos de los afectados aseguran que, por el momento, no pueden inscribirse en sus bolsas, ya que permanecen cerradas.

Y es que critican que hayan recibido la comunicación del cese este mismo martes, a dos semanas de acabar el año, cuando contaban en un principio con una prórroga. 

Piden más personal para mejorar la atención a las personas mayores

Los trabajadores han reclamado en un manifiesto la necesidad de ampliar el servicio para el cuidado de los mayores y piden una respuesta antes de que acabe el año, cuando se producirá el cese automático por el funcionamiento de este sistema de bolsas.

“Estamos hartos de trabajar con el mínimo personal disponible o menos, repercutiendo en el trato humano a nuestros residentes y en la salud laboral de trabajadores”, lo que habría acabado en situaciones de baja laboral, especialmente entre los auxiliares de enfermería.

Al parecer, los trabajadores explican que Conselleria les ha informado de que el sistema sufre la falta de trabajadores en las bolsas, un problema que se acrecenta en las fechas vacacionales, explican, cuando se complica cubrir los días libres de los empleados.

“Nos prometieron verbalmente que no nos preocupáramos que volveríamos a ser contratados y que seguiríamos en nuestros puestos de trabajo, pero a fecha de 31 de diciembre seremos cesados”, lamentan los trabajadores, que piden a Conselleria una respuesta sobre su futuro, al tiempo que lamentan que si no se tiene en cuenta esta situación de impasse tras los despidos a partir del 1 de enero podría haber “menos atención a nuestra querida gente mayor y más carga de trabajo para nuestros compañeros”. 

Hay que recordar que no es la primera protesta que vive la residencia de la calle Albert Einstein en los últimos tiempos, ya que empleados que trabajan para una de las subcontratan también se manifestaron alertando de retrasos en el pago de sus sueldos.