Molés considera que no debe retrasarse la urbanización de la Avenida de la Constitución tras el vertido de aguas turbias
El edil dijo que la presencia de aguas sucias en El Arenal cuyo origen aún se desconoce pone de manifiesto que la política turística del PP en todos los años que lleva gobernando Burriana, “es de risa, acuden a la mayoría de ferias turísticas para vender los atractivos de la ciudad y son incapaces de desviar una acequia”.
Molés declaró que la desaparición del cauce del Ull de la Vila es una parte del proyecto de ordenación del tramo central de la Avenida de la Constitución que lleva más de 10 años a la espera de ejecutarse. Agregó que situaciones como la que se produjo el miércoles en la playa atestada de bañistas que presenciaron la entrada de aguas sucias en la zona de baño “no deberían volver a repetirse y evitarlas debería ser una prioridad antes que gastar dinero en promover el turismo".
Molés afirmó que cualquier turista que se encuentre en una situación como la ocurrida “lo más probable es que se vaya y no vuelva y así no se consiguen objetivos más bien se da una imagen de Burriana pésima".
El edil del PSPV –PSOE subrayó que la alineación del tramo central de la Avenida de la Constitución lleva sin resolverse más de una decáda y que el PP parece no tener demasiado interés, "todos recordamos que se incluye en los presupuestos cada año una partida y despúes el dinero se destina a otras cosas".
La existencia de la acequia tiene también como resultado el que la playa de la Malvarrosa no pueda aspirar a la Bandera Azul. El concejal relató que años atrás se completó el desvío de otros cauces que conducian aguas a L'Arenal las denominadas acequias de la Gola, Finello –Ratjolí y Ratjolí de Perolets que se entubaron para trasladar el caudal a la zona límite de la playa y la escollera de Levante. Esta solución que en principio se consideró provisional sigue sin modificarse pese a que ha transcurrido un lustro desde entonces.
Molés dijo que el Grupo Municipal Socialista solicitará la opinión de los técnicos para determinar la procedencia de las aguas turbias del Ull de la Vila y el resultado de la analítica para determinar si contenían materia contaminante.
Por otra parte Molés denunció la mala imagen de las zonas de acceso a la ciudad, las deficiencias del transporte urbano que conecta el caso urbano con la zona marítima, el mal estado de los jardines, “la mayoría abandonados por completo y calles y plazas con el pavimento en malas condiciones y una limpieza que deja mucho que desear y así quienes nos visitan no van a llevarse un grato recuerdo".
