El Millars contará con un Plan Rector de Uso y Gestión antes de 2009
AT Control, firma adjudicataria de la consultoría y asistencia técnica, presenta esta tarde los avances del proyecto al Consejo de Participación Ciudadana
La firma adjudicataria, que a su vez es la responsable de ejecutar el proyecto de adecuación ambiental y uso educativo de la zona húmeda del Millars, desgranará esta tarde los objetivos de un plan que arrancó sus trabajos a finales de mayo y tiene un plazo de ejecución de seis meses. Conservar el valor ecológico y paisajístico del entorno, corregir sus impactos negativos, integrar los usos económicos y sociales, así como fomentar la participación pública son sólo algunos de los objetivos que persigue el PRUG.
El Consejo de Participación Ciudadana reúne esta tarde en el Aula de Natura de la ermita de Santa Quitèria al alcalde de Almassora, Vicente Casanova, representantes de la Conselleria de Medio Ambiente y Agua, así como de los tres ayuntamientos implicados, Almassora, Vila-real y Burriana. Igualmente, también están llamados a la reunión representantes de la Diputación Provincial y las Consellerias de Agricultura, Pesca y Alimentación, Cultura y Deporte, y Transportes. Igualmente la Confederación Hidrográfica del Júcar y el Servicio Provincial de Costas en Castellón también están llamados a la sesión.
Autoridades a las que se sumarán propietarios privados de terrenos incluidos en el ámbito del Paisaje Protegido, así como por un portavoz de las entidades locales de riegos vinculados al área y dos miembros de las asociaciones ligadas a la conservación y estudio de la naturaleza o el patrimonio cultural.
Adecuación ambiental
El Consejo de Participación Ciudadana, además de dar cuenta de los avances en el PRUG, también dará a conocer los avances en el proyecto de adecuación ambiental del Millars. La firma adjudicataria AT Control se emplea desde finales de 2007 en la ejecución de este ambicioso plan que pretende poner en valor la desembocadura. “Es un proyecto de calado que está cofinanciado por la Conselleria de Medio Ambiente y la Confederación Hidrográfica del Júcar con cargo a fondos europeos de desarrollo regional” (FEDER), ha destacado el concejal de Sostenibilidad, Enrique Brisach.
Con un plazo de ejecución de doce meses y un presupuesto de 1.397.654,76 euros, la empresa contratista prevé concluir el proyecto este año después de una exhaustiva adecuación que permitirá abrir nuevas rutas y senderos, miradores y espacios de convivencia que posibiliten explotar el gran potencial del Millars convirtiendo el humedal en un espacio atractivo y de gran interés ambiental y cultural. Objetivos que deben pasar, necesariamente, por la conservación y mantenimiento de este espacio natural único en la provincia.
El objetivo del consorcio del Millars, que reúne a tres ayuntamientos y representantes de otras instituciones públicas como la Conselleria de Medio Ambiente o la Diputación Provincial de Castelló, “es justamente éste, velar por la preservación de este espacio de forma que la gente lo conozca, lo disfrute y, por ende, aprenda a respetarlo”, ha indicado Brisach.
Cabe señalar que el río Millars fue declarado refugio de caza en 1996 y desde mayo del año 2000 está declarado Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA). En 2001, el entorno se incluyó entre los Lugares de Interés Comunitario (LIC) de la Comunidad Valenciana y en septiembre de 2002 pasó a formar parte del Catálogo de Zonas Húmedas de la Comunidad Valenciana. Por último, el paraje fue declarado Paisaje Protegido en abril de 2004.
El delta del Millars comprende una extensión de 424,65 hectáreas distribuidas en tres términos municipales que suman una población aproximada de 106.000 habitantes. Se trata de un espacio natural que comprende básicamente el cauce fluvial del río, con un régimen típicamente mediterráneo, y sometido por tanto a fluctuaciones intensas de caudal.