Familias de Burriana piden que sus hijos puedan volver a subir al bus escolar: “Es un sinsentido porque va vacío”
Varios padres y madres de un colegio piden que se rectifique y sus hijos puedan volver a usar el bus
Un grupo de familias del Puerto de Burriana reclama que sus hijos puedan volver a disfrutar del bus escolar al que podían subir hace solo unos años para acudir a colegio.
Así lo reclama Rebeca, una de las madres afectadas con sus hijos en el CEIP Penyagolosa de la capital de la Plana Baixa.
“Desde los años 90 pasaba a por nuestros hijos”, explica esta madre, que lamenta que los niños matriculados a partir del año 2020 ya no pueden acceder al autobús. Y aunque, si bien es cierto que con la mediación de la directora se pudo extender un año más con los nuevos alumnos de 2021, finalmente se cortó el acceso para los últimos en llegar al colegio.
Así, critican la medida que se tomó el anterior Consell del Botànic y reclaman a las actuales autoridades una solución ante una situación que complica el día a día a algunos padres.
“Queremos los mismos beneficios que el resto de colegios sin perder nuestros derechos”, exponen en los pasquines que han difundido para reclamar que puedan disfrutar del distrito único eligiendo centro educativo por sus propias preferencias mientras gozan del bus del que sí disponen otros colegios de la población.
“Es un sinsentido porque el bus va casi vacío y solo suben dos niños, porque no se acaba de llenar, mientras varias familias no pueden usarlo”, lamenta esta madre, que explica que el grupo de afectados ha comunicado la situación a Conselleria.
Al respecto, consultada esta cuestión a Conselleria, por elperiodic.com, tan solo recuerdan que para ser beneficiario se debe de cumplir la resolución que regula la cuestión, en la que se indica que solo será beneficiario del transporte escolar colectivo el alumnado escolarizado en el centro “siempre que sea el más próximo a su residencia habitual según la zonificación o ámbito de escolarización establecido” si es que su casa se ubica a más de tres kilómetros del colegio, como es el caso de la ciudad de Burriana con su puerto.
Los padres, en todo caso, insisten en el "sinsentido" que supone que el autobús circule medio vacío pudiendo aprovecharse por los otros alumnos y recuerda que no es la primera vez que se vive una situación similar, ya que en el año 1995 ya se quedaron varios estudiantes sin bus y el consistorio llegó a sufragar taxis hasta que se encontró una solución.
