El encierro de toros embolados dota de vistosidad la jornada del martes

Nuevamente los eventos taurinos han cobrado protagonismo en la jornada festiva en honor a la Virgen de la Misericordia, en la ciudad de Burriana.

Numerosos ciudadanos y aficionados al toro han cumplido con la agenda de actos programada asistiendo a las dos exhibiciones que han tenido lugar a las seis y a las siete de la tarde.
Una de las peñas más emblemática de la ciudad, sobre todo en lo que concierne a los astados, l’Alternativa, ha sido la encargada de patrocinar los dos toros cerriles que han sido soltados por la tarde.

Concretamente se trata de dos ejemplares bravos de la ganadería Toros de casa Domecq, que han ofrecido buenas salidas así como han animado a todos los asistentes al recinto y en especial a los recortadores, que han podido disfrutar con sendos astados.

La jornada ha proseguido, horas más tarde, nuevamente en el recinto de la vila del bou, donde en esta ocasión, los niños han sido quienes han protagonizado la actividad. Eran, aproximadamente las diez menos cuarto de la noche, cuando los más pequeños acompañados de sus mayores disfrutaron del encierro con carretones embolados. El evento se inició desde el barranquet y transcurrió por todo el recinto del toro.

Aproximadamente, una hora más tarde, el recinto volvió a ser el centro de la actividad congregando a cientos de vecinos expectantes por ver el encierro de toros embolados, procedentes de la ganadería de la Espuela. La vistosidad del encierro ha sido uno de los mayores atractivos del día que ha dejado con buen sabor de boca a los asistentes.

Sin embargo, el mal tiempo se fue intensificando a lo largo de la noche, lo que desembocó en una tormenta que impidió se exhibiese el toro embolado de la Espuela, que estaba previsto.