Los Chiringuitos tendrán una concesión de cuatro años a partir de año que viene

Los Chiringuitos de la playa tendrán una concesión para cuatro años a partir del año que viene, pero sólo durante el periodo estival. La propuesta planteada por los empresarios para que la concesión se prolongue a lo largo de los doce meses del año no es posible al no estar urbanizado el Arenal. La ley sólo permite concesiones por espacio de sesenta días, aunque ya hay una iniciativa por parte de las poblaciones costeras que poseen este tipo de instalaciones para pedir a la Generalitat que modifique la normativa a fin de que el periodo se amplíe desde el 1 de junio al 30 de septiembre, ya que el periodo estival no se limita a julio y agosto. Las concesiones a 4 años dispondrán de una cláusula de rescisión, para el caso de que se produzca el proyecto de urbanización del Arenal, aunque con la condición de estudiar una reubicación como locales de ocio en el futuro proyecto.

Este año, tal y como informó el concejal de actividades del Ayuntamiento de Burriana, Pedro Sancerni, habrá cuatro Chiringuitos, situados todos ellos en la zona del antiguo camping del Arenal, junto al paseo marítimo. Donde antes había tres Chiringuitos, ahora habrá cuatro. Dispondrán de una parcela de 450 m², y una distancia de separación entre ellos de 9 metros.

La semana próxima está previsto que se inicie el periodo de ocho días para presentar las plicas, a contar a partir de la fecha en la que aparezcan publicadas las bases en el BOP. Una vez concluido el plazo se procederá de inmediato a la adjudicación de los cuatro locales. En las bases se ha primado la antigüedad, como forma de garantizar que las empresas que allí se instalen son conocidas y no van a plantear problemas, ya que en vista a la denuncia que hubo el año pasado, y que se encuentra en los tribunales, se va a extremar el cumplimiento de lo que marca la normativa.

Se ha solicitado permiso a costas, porque una parte de las parcelas donde se ubicarán los locales, que tendrán licencia de pub, está afectada por la zona de protección marítimo terrestre.

El Ayuntamiento va a tomar una serie de medidas para evitar molestias a causa de la música. A la pantalla que de por si ya significan los árboles del antiguo camping, se va a unir la instalación, justo detrás de los locales, de una pantalla acústica de 105 metros que es la que se instalaba detrás de los tres Chiringuitos que en los dos últimos años había más allá de los merenderos. Los bafles estarán encarados al mar y se instalarán limitadores de volumen. Además se ha dado orden a la Universidad Politécnica de Valencia, que está elaborando en estos momentos, mediante un convenio, el mapa acústico de la ciudad, para que durante los meses estivales pongan especial atención a las mediciones, en especial a la transmisión de sonido a las viviendas, para detectar posibles incidencias, entre la avenida del Mediterráneo y el Grao.

Además de los cuatro Chiringuitos van a salir a concurso dos establecimientos de 150 m², que dispondrán de 20 metros cerrados, y 130 de terraza, que estarán dentro de la arena; uno justo enfrente de la primera rotonda de acceso a la playa, y otro frente a la segunda, que funcionarán como quiosco, heladería, y espacio para consumición de refrescos y alimentos envasados.

Estarán los cuatro merenderos habituales, y en todo el paseo marítimo no se colocará nada más. “Mi intención, explicaba Sancerni, es que el paseo esté totalmente despejado para pasear”.

Otras instalaciones, como un tiovivo, una churrería, y los tenderetes de ropa y abalorios que se solían montar en el paseo, se instalarán en el camino que cruza el antiguo camping, entre la zona en la que estaba Blue Bahía y el Pilón.