Chelo Felip, una emprendedora de Burriana vinculada a la moda

Burriana entrega este sábado 26 de marzo los premios ‘Dia de la Dona’ de 2022, un galardón que se incluye con motivo de los actos programada alrededor del Día Internacional de la Mujer.

Tres burrianenses reciben este premio en un acto que tendrá lugar en el salón de plenos del Ayuntamiento de Burriana. Se trata de Bibiana Collado, Milagros Hernández y Chelo Felip.

Elperiodic.com ha querido conocer más a fondo a Chelo Felip, que a sus 75 años, rebosa mucha vitalidad y ganas de seguir comiéndose el mundo.

Es una mujer inquieta, posiblemente una adelantada a su tiempo. Estudió sombrerería, su ilusión, en Valencia, trabajó en Madrid y abrió dos tiendas en Burriana. 

Compaginó su apasionante vida laboral con la crianza de sus tres hijas y aún tuvo tiempo para el voluntariado.

¿Cómo fueron sus inicios?

Con 15 años estuve en Madrid. Mi ilusión era hacer sombrerería y detalles, pero mi madre no me dejó. Más adelante averiguamos otro sitio en Valencia y estuve durante dos años estudiando y trabajando en la Sombrerería Abril, de la calle Caballeros. Allí  hice tocados, flores, pamelas y tocados de madrina. Me quedaba a dormir en una residencia de monjas en Valencia. En aquella época hicimos vestuarios para espectáculos de Tony Leblanc o Norma Duval.

Después abrió tu tienda en Burriana, ¿cómo fueron los comienzos?

Con 16 años yo ya trabajaba para modistas de Burriana, Vila-real, Castellón y Nules. 

Tenia ilusión por montar mi propia tienda y con 18 años ya tenía mi tienda de novias y tocados en la calle Mayor de Burriana. Todos los tocados de novia y velos pasaban por mí. La mayoría de la gente de Burriana han pasado por mis manos.

También hice sombreros a los niños de la falla Chicharro.

También estuvo trabajando en Madrid para la empresa Holyday Magic, ¿cómo recuerda aquella época?

Trabajé durante un tiempo en una empresa de baterías de cocina, fui ascendiendo y me ficharon en Holyday Madrid. Estuve haciendo unos cursos de formación y me ofrecieron llevar el departamento y por aquel entonces y tenía dos niñas. Tuve que elegir entre dinero y niñas, y elegí niñas y me quedé en Burriana. Poco después nació mi tercera hija. 

En Madrid viví mucho aunque entonces no le daba la importancia que le tenía que dar. Lo valoras al cabo del tiempo.

Ya de vuelta en Burriana me dediqué a lo mío, a los sombreros y los tocados, trabajando para modistas y haciendo voluntariado porque me gusta contactar con gente.

En su vida laboral, también ha trabajado para Xarxa Teatre. ¿Cómo fue aquello?

Cuando Xarxa Teatre empezó vinieron a buscarme porque tenían un espectáculo en Mérida, nadie se atrevía a aquello. Me explicaron el proyecto y estuve trabajando con Ripollés que, cuando vio el resultado, me dijo has superado mi fantasía. Estuve tres años haciendo vestuarios y figuras par sus espectáculos hasta que el corazón me dijo basta.

¿Continúa al pie del cañón?

Ahora tengo muchos clientes pero no cobro (se ríe), por eso tengo muchos clientes. Estoy en la Falla Quarts de Calatrava, con los musicales y ayudando en la cabalgata. Trabajo como una loca. Pero estoy feliz porque tengo vida.

¿Dónde ha estado de voluntaria?

Estuve en Castellón, iba una vez a la semana con una persona a la que le compraba medicinas, la acompañaba y hablábamos. Después Esteve cuatro años en oncología del Hospital Provincial de Castellón para acompañar a los enfermos que están ingresados y ayudar a sus acompañantes. 

Y también trabajar en el servido de ayuda a domicilio del Ayuntamiento de Burriana. 

¿Cómo ha compaginado la vida laboral, familiar y de voluntaria?

No sé como lo he podido hacer. Pero doy un consejo, si tienes que entrar a trabajar a las 8 y te tienes que ir a las 7, levántate a las 6. También le podía ayuda a Dios al empezar el día. Pero mi madre también me ayudó con el cuidado de mis hijas.