Burriana contará con una laguna artificial para impulsar el turismo medioambiental y la nidificación de aves
La nueva balsa se construirá en la zona de Carnissers, junto al río Millars
Con el objetivo de favorecer la nidificación, descanso y observación de las aves, pero también con la finalidad de fomentar el turismo medioambiental, el Consorcio gestor del Paisaje Protegido de la Desembocadura del río Millars construirá una laguna artificial en Burriana.
La nueva balsa de agua dulce se ubicará en una terraza aluvial del margen derecho del río, en la zona conocida como Carnissers.
El nuevo proyecto ha sido presentado esta mañana por la presidenta del consorcio y alcaldesa de Almassora, Merche Galí, la alcaldesa de Burriana, Mª Josep Safont, el concejal de Sostenibilidad de Burriana, Bruno Arnandis, y el edil de Medio Ambiente de Vila-real, José Ramón Ventura.
Como parte importante del , el Ayuntamiento de Burriana ha adquirido una finca rústica de regadío dedicada al uso agrario de poco más 1.900 metros cuadrados ubicada junto a la futura laguna. El derecho al riego de esta parcela rústica permitirá aportaciones periódicas de agua a la nueva laguna para mantener una lámina de agua indispensable de borde 40 centímetros que permitirá la presencia de las especies de aves que eligen estos ambientes acuáticos de aguas someras.
El consistorio cederá la finca rústica al Consorcio gestor del Paisaje Protegido de la Desembocadura del río Millars y a la vez descontará el importe de compra al presupuesto anual que paga como miembro del consorcio gestor.
Galí ha asegurado que la nueva laguna “pondrá en valor la zona y la hará visitable”, así como “devolver a la población parte del dinero que cada ayuntamiento aporta al consorcio”.
Para la construcción de la laguna están a la espera de los permisos de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ). Una vez dados, se licitarán las obras cuyo proyecto a elaborado un ingeniero. La intención de Safont es que las obras puedan empezar este año y estén acabadas en 2022.
Ornitoturismo
Por su parte, el edil de Burriana, Bruno Arnandis, ha asegurado que con este proyecto impulsarán el ornitoturismo, para favorecer la llegada de aves acuáticas y con el tiempo el objetivo es construir un mirador y una zona recreativa.
Los trabajos consistirán en en excavar la laguna e impermeabilizar la zona. Así, la excavación del vaso lagunar será de una profundidad mínima de 110 centímetros. Este calado asegurará una cuota libre de agua mínima de borde 40 centímetros una vez estén cumplidos los trabajos de impermeabilización.
A continuación se extenderá dos capas de material granular que se compactarán. Las capas se cubrirán por un geotextil que funcionará como capa protectora de la geomembrana impermeabilizando de polietileno de alta densidad de grosor que completará los trabajos de impermeabilización.
Rodeando la laguna se plantarán especies características de estos ecosistemas como son el carrizo (Phragmites australis), la boga (Scirpus holoschoneus), el lirio amarillo (Iris pseudacorus). Paralelamente se construirá y soterrará una tubería desde la acequia que regaba la finca rústica hasta la nueva laguna. La viabilidad de la laguna pasa por conectar el sistema lagunar con la red de riego.
Por lo tanto ha sido indispensable que el Consorcio gestor del Paisaje Protegido de la Desembocadura del río Mijares dispusiera la finca rústica con los derechos de riego asociados. Las obras tendrán un presupuesto de ejecución de 32. 405,66 € y el periodo de ejecución se ha fijado en unos 28 días.