La Plaza dels Furs de Burjassot cambia sus especies arbóreas por seguridad
Uno de los puntos más emblemáticos de Burjassot, la Plaza dels Furs, ha visto cómo su fisonomía ha cambiado en los últimos días ya que, el Ayuntamiento del municipio, ofreciendo su ayuda a los responsables eclesiásticos de la parroquia de San Miguel Arcángel, puesto que la Plaza es propiedad del Arzobispado, ha procedido a la retirada de los ejemplares de este espacio tras las reiteradas llamadas de vecinos que alertaban de una posible caída de los mismos tras el pasado temporal de viento. El Ayuntamiento, con el conocimiento de la Asociación de Vecinos del barrio y el responsable parroquial, ha procedido a su retirada por motivos de seguridad, coincidiendo además en el tiempo con estudios que se estaban realizando sobre la salud de algunos de los ejemplares que no se encontraban en buenas condiciones.
El motivo de esta retirada, como ya hemos apuntando, ha sido por seguridad, no sólo para los propios vecinos de la zona y los viandantes sino también para los niños y las niñas del Colegio San Miguel que cada día utilizan este espacio como patio de recreo. Los árboles que estaban en la plaza habían adquirido unas dimensiones considerables y tras el fin de semana de temporal de viento que sufrió Burjassot las llamadas de los y las vecinas de la zona se multiplicaron. El hecho es que, además de aumentar sus dimensiones, algunos de estos árboles estaban enfermos y débiles de sujeción. Ante este panorama tanto los técnicos del Ayuntamiento, como los responsables políticos del municipio junto con los bomberos consideraron oportuna la retirada de los árboles, retirada que ya se ha hecho efectiva.
Tras la retirada de los mismos, el Ayuntamiento se va a hacer cargo de situar nuevas especies arbóreas, en este caso el Cercis Siliquastrum o Árbol del Amor, especie que ya está situada junto a la Plaza dels Furs, en el Colegio Mayor San Juan de Ribera y que se trata de una leguminosa con raíces de buena sujeción con un crecimiento moderado, apropiado para el espacio en el que se encuentra. Esta acción por parte del Consistorio se une a la ya realizada tras el pasado temporal de viento que supuso la actuación de la Brigada Municipal de Obras ante la caída de un árbol en el Castell. De forma efectiva, este servicio municipal valló la zona y retiró los restos del árbol y, en estos momentos mantiene la valla de seguridad.
Asimismo, en próximas fechas, y por parte del Arzobispado, propietario del terreno, se va a llevar a cabo el vallado de la Plaza para el uso por parte del colegio adyacente como patio recreo, lo que significará mayor seguridad para los y las alumnas del centro.