El Ayuntamiento de Burjassot vuelve a instar a la Generalitat Valenciana a que cumpla con sus obligaciones en materia educativa en el municipio
Cambios de calderas, de la red eléctrica, acabar con los problemas del amianto en el centro Virgen Desamparados…y así un suma y sigue de acciones que la Conselleria no realiza en Burjassot y que está llevando a las protestas de toda la comunidad educativa del municipio. Comunidad que, como siempre, tiene el apoyo constante de la Concejalía de Educación, dirigida por Adela Pérez, y del Equipo de Gobierno en pleno.
No en vano, es la Concejalía de Servicios Municipales la que, gracias al trabajo de la Brigada Municipal de Obras, está llevando a cabo no sólo las tareas de mantenimiento que le corresponden sino que, también, realiza aquellas necesarias y que, de manera provisional, permiten que los y las niñas de Burjassot puedan asistir a clase.
Además, es de destacar que incluso el Síndic de Greuges ha dado la razón al Consistorio en todas sus reclamaciones e insta a la administración competente, la Conselleria, a realizar las obras que le corresponden. El Síndic ha llegado a señalar que el Consistorio realiza más acciones que las que le corresponden. Siempre, por el beneficio de los y las niñas del municipio.
Un buen ejemplo de ello es el refuerzo en la instalación de la red eléctrica en el Villar Palasí para que los alumnos pudieran dar sus clases de informática. Unas mejoras que son competencia de la Generalitat y que no asume y que tan sólo han solucionado el problema, tal y como se ha señalado, de manera provisional. Asimismo, es de destacar que con fecha de julio de este año, la Conselleria comunicaba a este mismo centro las obras de renovación de los núcleos de aseos y vestuarios deportivos del colegio y la reposición parcial del vallado existente. Obras que no se iniciaron en todo el verano, a pesar de tener un plazo de ejecución de 3 meses, y que han supuesto que se vuelvan a abrir las viejas instalaciones, tras la realización del mantenimiento por parte del Ayuntamiento.
Otro de los centros que también se ve afectado por la inoperancia de la Generalitat es el Virgen Desamparados que, a sus problemas de espacio en la instalación, con cocinas y baños obsoletos y los problemas en los turnos de comidas, añade la mala adaptación de los aseos para las diferentes edades, la falta de gimnasio o la inexistencia de espacios para guardar el material propio.
Una situación insostenible, tal y como se ha señalado, que afecta no sólo a los centros mencionados sino al resto de colegios de Burjassot que ven como el único programa de conservación que se desarrolla es el del Consistorio. Y, es que, la Generalitat no se hace cargo de las necesidades de los colegios de Burjassot.