Bétera aprueba arreglar los tramos más peligrosos del Camino de Moncada y del camino de La Providencia

El Ayuntamiento de Bétera aprobó en el pleno de agosto la necesidad de llevar a cabo el acondicionamiento de los caminos de "La Providencia" y del "Camino de Moncada", dos vías que el gobierno local (Compromís, PSPV-PSOE y ABeC) ha considerado que deben ser intervenidas por la seguridad vial de vehículos y peatones.

Tal y como explicó la concejal de Urbanismo, Neus Sánchez (Compromís), durante la sesión plenaria "se han estudiado los caminos con más tráfico y dos de los tramos del Camino de Moncada son realmente peligrosos tanto por su estrechez como por las curvas cerradas".

El proyecto contempla actuar en dos tramos que suman 1350 metros situados entre el Camí de Forn de la Calç y la salida de la CV-310. En estos momentos ambos tramos son estrechos, sin arcén y con varias curvas peligrosas, por lo que el proyecto contempla la adecuación de la explanada que pasará de tener 5 y 7 metros a un ancho regularizado de 8 metros, con dos carriles y dos arcenes; además se realizarán obras de evacuación de aguas pluviales mediante cunetas y se eliminarán las curvas peligrosas en el tramo que discurre junto a la vía del ferrocarril. Se limpiarán, desbrozará y asfaltará.

Camino de La Providencia

También se ha aprobado actuar sobre dos tramos del Camino de La Providencia. Concretamente, las obras de mejora comprenderán desde la calle Point de Sant Martin hasta la Unidad de Ejecución de La Providencia para enlazar con la CV-310. El Ayuntamiento de Bétera construirá una nueva acera en una de las partes del camino para que los vecinos de esta urbanización puedan ir a pie al casco urbano sin peligro de ser atropellados. "Este camino tiene mucho tráfico y es muy problemático por lo que, aunque no podemos arreglarlo todo, sí vamos a arreglar un tramo considerable para aumentar la seguridad y mejorar la circulación de los vecinos de la zona", explica la concejal del área.

Unanimidad de todos los grupos políticos

Ambos puntos se aprobaron por unanimidad de todos los grupos políticos. La portavoz del PP, Elia Verdevío, insistió en la necesidad de actuar sobre todo "en tres puntos concretos donde hay tres curvas muy peligrosas y conflictivas".