El nuevo mural de Benissa que muestra la esencia de su paisaje desde la Fustera hasta Bèrnia y rinde homenaje a Pere Bigot
La gran pared de la plaza rector Salvador Fuster, ubicada en pleno centro histórico de Benissa, ha sido el último lienzo sobre el que ha plasmado todo su arte el artista urbano valenciano Dridali.
La concejalía de Imagen Urbana, dirigida por Adrián Cabrera, planteó el reto de pintar la enorme pared con un mural que representara gran parte de la esencia benissera. Dridali recogió el guante y, en tan solo una semana, la gran pared se ha convertido en una obra de arte que muestra el Paseo Ecológico a su llegada a la playa de la Fustera y se va diluyendo hasta dibujar la sierra de Bèrnia. En el centro del gran mural, Pere Bigot tocando el acordeón rodeado de niños del pueblo, una imagen extraída de una fotografía de Miguel Giner, el barber.
El nuevo mural está ubicado en un lugar que le otorga mucha visibilidad, dado que se encuentra en pleno centro histórico, justo detrás de la Basílica Puríssima Xiqueta, y al lado de la transitada Avinguda del País Valencià.
“Dridali es un reconocido artista que ha plasmado a la perfección nuestra idea. Este mural es un homenaje a nuestra esencia y nuestras raíces”, ha destacado Cabrera.
En palabras de Arturo Poquet, alcalde de Benissa: “estamos muy satisfechos con el resultado. Es una obra que, además de darle una nueva imagen a la plaza, le rinde homenaje al gran Pere Bigot”.
Adrián Mateo Rubio, conocido artísticamente como Dridali, es un reconocido artista urbano que centra su obra en la creación de rostros de personas con el estilo hiperrealista que lo caracteriza. Su obra se puede ver en las calles de muchos países, desde Sri Lanka, pasando por Francia, Noruego o Marruecos. En 2021, su mural Efecto Caparina fue seleccionado entre los 100 mejores graffitis del mundo por la Street Art Cities, la mayor comunidad de arte urbano del mundo.