Toreo a cuerpo limpio en las bodas de oro de la plaza de toros de Benidorm
Arte y Emoción no faltó a las bodas de oro de la plaza de toros de Benidorm. El grupo de recortadores valenciano volvió a hacer el paseíllo el sábado en el año del 50 aniversario de un coso con el que comenzaron a estrechar lazos hace ya tres años, cuando consiguieron abrirlo para la celebración de festejos taurinos populares.
Vecinos y turistas ocuparon sus localidades a partir de las 22.30 horas para dar la bienvenida a Fran Mesas, Rober, Juanan, Cristo y Panchito, quién respondió con un quiebro a la primera vaca de la noche la ovación recibida de manos del público . La colorada, marcada con el hierro de José Ortega y el número 55, no les puso las cosas fáciles a los recortadores que tuvieron que pedirle pelea buscándola en tablas para sacarle recortes y quiebros. La segunda vaca fue recibida a porta gayola por Juanan al que le siguieron sus compañeros con una serie de saltos encadenados que cerró Fran Mesas con uno con la garrocha. El animal, que ofreció más posibilidades que su hermana, volvió a chiqueros encelada en otra serie de saltos encadenados que bien mereció los aplausos del público. El recital de saltos continuó con el toro que salió de chiqueros en tercer lugar.
PARTE INFANTIL Y CÓMICA
Decenas de niños bajaron al ruedo cerca de la medianoche para imitar a sus ídolos en el Concurso de Recortes Infantil, donde burlaron a un carretón a base de ejecutar recortes, quiebros y saltos y corrieron un encierro. Un esfuerzo que tuvo su recompensa con el reparto de fartons de la firma Fartons Polo.
El espectáculo continuó con la parte cómica en la que Juanan y Rober demostraron su maestría con el balancín y Cristo con el número del Don Tancredo. Cerró la noche un partido de fútbol vaca y la suelta de reses para el público en el ruedo de un coso que se niega a cesar su idilio con la tauromaquia.