El segundo Plan E destinará 250.000 euros a mejoras y arreglos en los colegios

El alcalde de Benidorm, Agustín Navarro, ha avanzado esta mañana que se van a destinar 250.000 euros del segundo Plan E a mejoras y arreglos en los colegios públicos de Benidorm. Así, ha desglosado que se hará un aula en la escuela infantil de Les Caletes, con la que se acabará con la lista de espera del centro; un comedor en el centro Leonor Canalejas; y otro en el Bautista Lledó, que contará con una inversión de 160.000 euros.

“Vamos a tocar todos los colegios de Benidorm con el arreglo que corresponda a cada uno de ellos. Son arreglos pequeños, dentro de los 7 millones de euros de este Plan E, pero son necesidades que estaban ahí”, ha asegurado el alcalde, quien ha explicado que espera que todos los proyectos incluidos puedan ser llevados al Pleno del día 25 de enero.

Sobre el resto de proyectos ha precisado que el centro de día, según los técnicos de Bienestar Social, será un centro de atención a mayores. Igualmente, ha recordado que la instalación de un control con huella digital en el Ayuntamiento se ha retrasado para que pueda entrar en este Plan, que cuesta unos 60.000 euros y contará con varios aparatos que todavía está por determinar dónde irán ubicados.

Al respecto de los proyectos del primer Plan E, Navarro ha explicado que las rotondas y las obras del Calvari están próximos a su finalización. Precisamente, de éste último ha dicho que se están instalando cámaras para que los vehículos autorizados puedan acceder a la zona automáticamente. Además, si el nuevo sistema fallara desde comisaría pueden autorizar y dejarles pasar.

Aparcamientos en la playa de Poniente
Sobre la falta de aparcamientos en la zona de la playa de Poniente, el alcalde ha avanzado que se va a estudiar con los técnicos municipales y a petición de los comerciantes de la zona, que el carril que queda pegado a la acera pueda ser utilizado para aparcamiento, parada de autobuses, taxis, zona de carga y descarga, mientras que el izquierdo quedaría para el tráfico, como sucede en la actualidad. En este sentido, Navarro ha dejado claro que no hay tomada ninguna decisión al respecto.

“Nos lo han pedido los comerciantes de la zona porque al no haber ni prever ningún aparcamiento nadie para a tomar un café ni a comer”, ha señalado Navarro que también ha añadido que “los comerciantes prefieren tener coches delante y que la gente esté comiendo a no tener a nadie en la terraza”.