El Museu Boca del Calvari inaugura la exposición ‘Guardianes del mar. La Torre de les Caletes’

El Museu Boca del Calvari abrió ayer sus puertas a una de sus más grandes apuestas; la exposición ‘Guardianes del mar. La Torre de les Caletes’, que llega de manos de la Diputación Provincial de Alicante y del Museo Arqueológico de Alicante (MARQ) y que está centrada en esta torre vigía del siglo XVI localizada en la Punta del Cavall y catalogada como Bien de Interés Cultural (BIC).

La inauguración de la exposición contó con numeroso público, además de la asistencia del alcalde de la ciudad, Toni Pérez, la concejal de Patrimonio Histórico y Cultural, Ana Pellicer, la jefa del Servicio Provincial de Costas, Rosa de los Ríos, Manuel Olcina, director técnico del MARQ, José Luis Menéndez, comisario de la exposición, José Alberto Cortés, director gerente del MARQ, el diputado provincial José Ramón González de Zárate, el diputado autonómico Manuel Pérez Fenoll, miembros de la corporación y las reinas de les Festes Majors Patronals Daniela Talavera y Angélica Morenilla, junto al presidente Vicente Solaz, entre otras personalidades.

La concejal del área, Ana Pellicer, ha sido la primera en intervenir y ha explicado que “el gran atractivo de esta muestra, además de conocer todo el contexto histórico y papel que jugó la Torre de les Caletes a lo largo de varios siglos, es poder ver el material y objetos que los arqueólogos hallaron y recuperaron durante los años 2017 y 2018 y que se encuentran bajo custodia del MARQ”. Además ha agradecido “la sensibilidad que han tenido todos los colaboradores para hacer realidad esta propuesta”. La edil ha querido destacar que una de las apuestas del Ayuntamiento es “hacer de la ciudad un museo al aire libre y que esta sea la primera de muchas propuestas”.

“Con la vuelta temporal a Benidorm de este material completamos el relato que iniciamos en 2017 cuando, a petición del Ayuntamiento, el Servicio Provincial de Costas ejecutó el proyecto de consolidación del acantilado sobre el que se levanta la torre y procedió a su restauración, asegurando así su pervivencia en el tiempo” ha añadido. Todo el material encontrado fue tratado, analizado y catalogado por el MARQ y permitió a los arqueólogos saber cómo vivían los vigías que habitaban la Torre de les Caletes, desde la indumentaria que portaban, las armas que utilizaban e incluso su dieta.

La exposición cuenta con un diseño exclusivo muy visual, que favorece la interacción del espectador. Una muestra que no llega sola, sino que lo hace junto a la exposición ‘Guardianes de piedra. Los castillos de Alicante’, en la que se hace un recorrido por las principales fortificaciones de la provincia. También en esta segunda exposición Benidorm está presente, a través del Castell, que formaba parte de la línea defensiva de costa.

Rosa de los Ríos destacó por su parte las actuaciones de Costas “con inversiones para rehabilitar y recuperar nuestro pasado” mientras Manuel Olcina disertó sobre el origen y función de las torres de vigilancia y del pasado de la costa mediterránea, “que era vacío, con pocos centinelas, muy alejado de lo que es hoy”. Entonces, dijo, “la costa se presentaba como un territorio inseguro y se despobló”. Sobre la Torre de Les Caletes detalló que “tenía como obligación avisar a la población de los ataques berberiscos y era una torre solitaria que se comunicaba con otras dos”. Olcina felicitó al Ayuntamiento “por la exposición y por la labor de recuperación de la torre, así como a todos los que lo han hecho posible”.

José Luis Menéndez, comisario de la exposición, recordó la “necesidad de las poblaciones de la provincia de fortificarse y amurallarse, lo que ahora para nosotros es un gran cofre de información. Benidorm es un gran ejemplo de las más de 1.200 fortificaciones que se conservan en el Mediterráneo” por lo que pidió “disfrutar de estos tesoros y admirar el magnífico trabajo de los profesionales del MARQ”.

José Alberto Cortés, director del MARQ señaló por su parte que la exposición “nos acerca a la gente” y es que “llevamos mucho tiempo detrás de hacer esta exposición” afirmó..

El acto fue cerrado por el alcalde, que rememoró que “la historia que se nos ha contado es que Benidorm era tierra de corsarios” y desveló que “nadie sospechaba que esa torre encerraba hasta hoy un gran tesoro para la ciudad” en alusión a las pertenencias de “la persona que estaba ahí para proteger a la población y que en su huida dejó no solo sus pertenencias, sino hasta su comida”.

Pérez se refirió también a las actuaciones e inversiones realizadas en la Torre de Les Caletes, lo que permitió “consolidar el acantilado y hallar un habitáculo que estaba en muy buenas condiciones”. Por último quiso señalar que con esta exposición “recordaremos que el pasado de Benidorm era tan esplendoroso como el futuro que queremos”.

Tras las intervenciones se dio paso a la visita a la exposición en la que el público podrá encontrar elementos textiles –entre ellos, unas alpargatas-, restos de la vajilla empleada para almacenar agua, fragmentos de vid utilizados para prender las hogueras que permitían dar la voz de alerta en caso de incursiones piráticas en la costa, o balas de plomo de mosquetes de defensa.