Benidorm despide las Fallas 2017 con la Cremà de los monumentos
Las llamas han puesto punto final esta pasada madrugada a las Fallas 2017. Los seis monumentos falleros de Benidorm, tres infantiles y tres grandes, han sucumbido al fuego en una noche de San José que, como suele ser habitual, ha congregado a centenares de personas que han querido vivir de cerca la magia de La Cremà.
Las primeras en arder, a las 23.00 horas, han sido las fallas infantiles de las tres comisiones: Rincón de Loix, Centro y Els Tolls. Minutos antes, Naiara Pérez, fallera infantil del Rincón escogía el 'ninot indultat' que iba a salvarse de las llamas, y lo mismo hacían Verónica Buján y Teresa Peris en los monumentos del Centro y Els Tolls.
Con la llegada de la medianoche, se ha iniciado la Cremà de la falla grande del Rincón de Loix. Acompañada del alcalde, Toni Pérez; del concejal de Fiestas, Jesús Carrobles; y del presidente de la Junta Local Fallera, Daniel Masip; la fallera mayor de la comisión, Tania Rico, ha prendido la mecha que en cuestión de minutos ha hecho que el fuego se apoderase del monumento plantado en la avenida Atmella del Mar.
Media hora después, la comitiva oficial –en la que también se encontraban el edil de Seguridad Ciudadana, Lorenzo Martínez; varios concejales de la corporación y miembros de la Junta Local Fallera- se ha desplazado hasta la Plaza Triangular para asistir a la Cremà del monumento que obtuvo el primer premio y el premio a la crítica. Ante la atenta mirada de la fallera mayor, Natalia Buján, el monumento ha ido poco a poco consumiéndose hasta reducirse a cenizas.
A las 01.00 horas, y también con numeroso público, se ha iniciado la Cremà de la última falla, la de Els Tolls. Al son del pasodoble 'El Fallero', las llamas han ido devorando los 'ninots' de este monumento ubicado en la calle Tomás Ortuño. Como marca la tradición y mientras el fuego engullía las figuras, la fallera mayor, Fátima Carrobles, ha rodeado el monumento junto a los integrantes de su comisión. Un ritual de fuego con el que Benidorm ha despedido las Fallas de 2017, las primeras de esta fiesta como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.
