El alcalde aprueba la nueva barandilla de Poniente al no crear una barrera visual frente al mar

El alcalde de Benidorm, Manuel Pérez Fenoll, ha visitado las obras del Paseo de Poniente, junto al concejal de Urbanismo, José Ramón González de Zárate, y acompañados por el jefe de obra, Rafael Vidal, para comprobar el efecto de la nueva barandilla en acero inoxidable que se acaba de colocar, a modo de primera prueba. El primer edil ha manifestado su satisfacción por el diseño utilizado, que permite la mayor visibilidad posible de la playa y el mar, y no constituye una barrera visual para los usuarios del paseo. Las obras del Paseo de Poniente siguen desarrollándose a buen ritmo, después de que el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, pusiera la primera piedra de esta obra en el mes de septiembre de 2006, para un proyecto en el que el Gobierno Valenciano está invirtiendo más de 14 millones de euros. El alcalde ha explicado que una vez haya pasado Semana Santa los trabajos, muy avanzados, se centrarán en la colocación del mobiliario urbano y alumbrado, así como de toda la jardinería.

Este paseo marítimo se estructura como un espacio dinámico que permite el paseo y el mirador sobre el mar, pero también organiza diferentes zonas de estancia para la contemplación. Un espacio público que posibilita la transición entre la ciudad y el mar a lo largo de 1.300 metros.

Las obras del Paseo Marítimo Playa de Poniente-Benidorm, sobre proyecto del arquitecto catalán Carlos Ferrater, suponen una reordenación y un nuevo concepto de la transición entre la trama urbana y el frente marítimo. Se pueden distinguir dos fases completamente diferenciadas en la ejecución de los trabajos. Una primera fase ha supuesto la reposición de todos los servicios afectados por las obras: media tensión, telefonía, semafórica, pluviales, saneamiento, agua potable, etc. La segunda fase, ahora muy avanzada, supone la ejecución de la estructura del paseo. Esta estructura está materializada por unos contrafuertes de hormigón y por un muro de hormigón blanco proyectado que conforma una auténtica superficie curva de una altura aproximada de tres metros. Dada la complejidad de las formas orográficas proyectadas en todo el relieve previsto, éste se estructura en módulos constructivos que se repiten periódicamente hasta conseguir la longitud total del perfil.

Carlos Ferrater ha proyectado desde su despacho de Barcelona edificios emblemáticos como el Hotel Rey Juan Carlos I, en la Ciudad Condal, el nuevo Palacio de Congresos de Cataluña o la nueva sede de Deacaux Internacional en Madrid. En colaboración con Xavier Martí ha sido el creador del  proyecto para el nuevo Paseo de Poniente de Benidorm que ya perfila el final de sus obras.