El Ayuntamiento solicita una subvención de 240.000 euros para la reurbanización del cruce de las calles Garganes y Raspall
El Ayuntamiento de Altea ha solicitado una subvención a la Diputación de Alicante para la remodelación del entorno de las calles Raspall-Garganes, por un importe de 240.000 euros y que supondrá la prolongación natural de las obras de mejora que se están llevando a cabo en la Avenida Jaume I hasta Pont de Moncau. Todas estas obras se encuentran enmarcadas dentro del Plan de Acción Comercial y han sido consensuadas entre comerciantes, vecinos y Ayuntamiento. Su finalidad es cambiar la fisonomía de esta céntrica arteria comercial de Altea para hacerla más atractiva para los consumidores y más cómoda para residentes, visitantes y turistas.
Cabe recordar que el Plan de Acción Comercial, implementado por el Ayuntamiento, consta de tres fases: la primera de ellas, la remodelación de la Avenida Jaume I (desde Garganes hasta Pont de Moncau) y que ya está ejecutada; la segunda, la Plaça dels Esports, que ya tiene concedida la subvención al 100% de la Generalitat Valenciana y cuyo expediente ya se ha iniciado; y la tercera, Garganes-Raspall, con la petición de la subvención a la Diputación.
Concretamente, esta última actuación consistirá en la ampliación de una de las aceras y la redistribución de los carriles de circulación. De este modo, el cruce con la Avenida Jaume I se transformará en un espacio más accesible para los peatones, desplazando la circulación rodada hacia el eje de circulación de la Avenida y liberando el resto para uso social de transeúntes.
En cuanto al tráfico rodado, el tramo de la C/Garganes desde la rotonda y hasta la N-332 tendrá dos carriles para ese sentido de la circulación y uno de entrada desde la nacional. Mientras que la C/Raspall hasta la rotonda, tendrá dos carriles de bajada hacia la Avenida y uno de subida hacia Raspall. Para ampliar, tanto las aceras como los sentidos de circulación, se va a eliminar la fila de aparcamientos del tramo entre Garganes y la intersección con el Camí de l’Institut. También se suprime el estacionamiento situado en la intersección de la actual rotonda con las calles Catarroja y A Llargues. En total, se suprimen 12 plazas de aparcamiento. Sin embargo, hay que recordar que a escasos 200 metros, se acaba de habilitar un nuevo parking en el Camí de l’Horta con una capacidad para 500 vehículos.
Asimismo, la iniciativa va a suponer la sustitución de la actual fuente de la Calle Garganes, por otras dos fuentes que se instalarán a ambos lados del cruce de ambas calles junto con elementos de jardinería. Se hará en sentido longitudinal y sin interrumpir el tráfico, de manera que constituya una prolongación natural de la Avenida.
Tal y como ha asegurado el Alcalde en contadas ocasiones, todas las obras que se están llevando a cabo en la Avenida, y a las que ahora se suma este proyecto, “son infraestructuras imprescindibles que tienen como objetivo, por una parte mejorar la calidad de vida de los vecinos que viven en esta zona; y por otra, impulsar el Plan de Acción Comercial con el que intentamos hacer de la zona centro de Altea un espacio lo más agradable posible, para que los vecinos de Altea y comarca encuentren en la avenida Jaume I un área atractiva y sugerente para realizar sus compras”.
En este sentido, Miguel Ortiz ha recordado que “desde el inicio hemos querido que haya un consenso entre comerciantes, vecinos y Ayuntamiento. Estas obras son la consecuencia de más de dos años de reuniones, entre comerciantes, vecinos y Ayuntamiento. Desde el primer momento, se ha intentado y hemos conseguido buscar el elemento común y aglutinador, por parte de la mayoría de comerciantes, de los técnicos del Ayuntamiento y también por parte de los vecinos. Gracias a ese esfuerzo de todos hemos conseguido consensuar una de las obras más importantes de las que se pueden realizar en Altea”.