Alrededor de un 20% de enfermos renales está en riesgo de desnutrición
Desde el Colegio Oficial de Dietistas-Nutricionistas de la Comunitat Valenciana (CODiNuCoVa) afirman que el nutricionista renal es una pieza fundamental a la hora de evitar la malnutrición de estos pacientes
A pesar de que cada vez más va creciendo la conciencia sobre la importancia de la alimentación en nuestro organismo, todavía queda camino por recorrer en nuestro país para que los profesionales de la Nutrición sean integrados en el Sistema Sanitario y, por tanto, en los equipos multidisciplinares, y que el paciente reciba una atención completa para mejorar su salud. Con motivo del Día Mundial del Riñón, que se celebra mañana 11 de marzo, el Colegio Oficial de Dietistas-Nutricionistas de la Comunitat Valenciana (CODiNuCoVa), ha querido poner el foco en la importancia de vigilar la alimentación de los pacientes renales puesto que alrededor de un 20% de ellos, es decir, 1 de cada 5, está en riesgo de desnutrición, antes de recibir un tratamiento de diálisis.
“La modificación del patrón alimentario en estos pacientes es uno de los factores clave para retrasar la necesidad de un tratamiento renal sustitutivo y, en el caso de aquellos que ya se estén sometiendo a diálisis, para prevenir complicaciones y problemas asociados, como pueden ser los cardiovasculares, disminuir la tasa de mortalidad e incluso evitar que se les rechace en una lista de trasplante”, apunta Christian Mañas, miembro de la Junta Directiva del CODiNuCoVa y dietista-nutricionista en el servicio de Nefrología del Hospital General de València.
Este patrón alimentario pasa, según el experto y para aquellos pacientes que no se encuentran en diálisis, por controlar los niveles de fósforo, sodio y potasio y disminuir la ingesta de proteínas “de manera que no se sobrecargue el riñón y, por tanto, ayudando a frenar la progresión de la enfermedad”. El hecho de entrar en diálisis ya supone un riesgo de desnutrición ya que la máquina a la que están conectados se queda parte de las proteínas circulantes en sangre y muchos pacientes llevan años con este tratamiento sustitutorio”, apunta el dietista.
A pesar de que comienza a haber interés por la adherencia a la dieta en Enfermedad Renal Crónica, la gran mayoría de pacientes renales no saben que un cambio en su dieta mejoraría su estado de salud. “La labor de Educación Nutricional es diaria, no podemos pasarla por alto”, añade Mañas. Para el CODiNuCoVa esto se conseguiría con la integración de los dietistas-nutricionistas en la Sanidad Pública, tanto en Atención Primaria como en hospitales. “El nutricionista es una pieza clave del sistema sanitario a la hora de gestionar todo el aspecto nutricional de los pacientes y, sobre todo, evitar los frecuentes casos de malnutrición. Al ser una enfermedad en la que tienes que controlar los micronutrientes la población con enfermedad renal, la mayoría de ellos ancianos, tienen muchas dudas y necesitan un profesional de referencia, que es el dietista-nutricionista. Sin embargo, actualmente existen menos de 10 profesionales de la Nutrición en servicios de Nefrología de toda España, una cifra ridícula”, afirma el especialista del CODiNuCoVa.
Desde el Colegio Oficial de Dietistas-Nutricionistas de la Comunitat Valenciana reclaman la inclusión de estos profesionales en el SNS, como un “profesional sanitario más” que ayudaría a mejorar la salud de la población e insisten en que España es el único país de la Unión Europea en el que es residual la presencia de estos profesionales en el Sistema Público de Salud.