El Ayuntamiento de Almussafes reducirá el IBI del casco urbano entre un 20 y un 25 por ciento en el 2014

El equipo de gobierno de Almussafes cumple la promesa realizada públicamente por parte del propio alcalde a mediados de año de reducir el tipo impositivo aplicado al Impuesto sobre los Bienes Inmuebles del casco urbano entre un 20 y un 25%. El próximo año, los contribuyentes van a percibir una gran reducción en sus recibos, a los que se les aplicará un tipo impositivo que pasará del índice 0’52% del 2013 al 0’42%. Almussafes se convertirá así en el pueblo de la comarca de la Ribera con el coeficiente de IBI más bajo – prácticamente el mínimo legal aplicable por Ley del Catastro -, retornando a las cantidades impositivas que se aplicaban en el año 2001. El gobierno de coalición BLOC-Compromís – PP ha tenido que lidiar durante los últimos años con unos valores catastrales muy alejados de la realidad económica, como consecuencia del resultado de la ponencia de valores solicitada en el año 2005, cuando todavía el PSOE gobernaba en el municipio, y que llevan minimizando desde hace cuatro años con el único mecanismo del que dispone la administración local que es la bajada del tipo impositivo, que se reduce anualmente en 2 puntos por voluntad del equipo de gobierno. Asimismo, antes del 31 de enero del 2014, el equipo de gobierno solicitará ante el Catastro la reducción de los valores catastrales para el año 2015, puesto que la ley establece que tienen que haber transcurrido al menos cinco años desde la entrada en vigor de los valores catastrales derivados del anterior procedimiento de valoración colectiva de carácter general (2009-2014).

La modificación del artículo 1 de la Ordenanza Reguladora del Impuesto sobre los Bienes Inmuebles Urbanos va a suponer que durante el ejercicio fiscal del 2014, los vecinos y vecinas de la localidad se beneficien de una bajada económica de sus recibos que va a oscilar entre un 20 y un 25%, puesto que se modifica el tipo de gravamen en función del valor catastral y de uso de cada inmueble. En términos generales, esto va a significar una reducción en los recibos del IBI que oscilará entre 60 y 300 euros, según el valor catastral de cada inmueble.

“Con esta medida que vamos a aprobar en la próxima sesión plenaria, el IBI de Almussafes se situará en las cuantías impositivas existentes en el año 2001, cuando el coeficiente impositivo se situaba en el 0’80%”, declara la máxima autoridad municipal, Albert Girona.

Como consecuencia de ello, se generará una merma sustancial de ingresos en las arcas municipales, que se situará en torno a los 400.000 euros, puesto que se pasará de los 2.491.023 euros por recaudación del IBI urbana del caso urbano del presente ejercicio fiscal a los 2.011.980 euros en el 2014. “Paliaremos la bajada de los ingresos con una mejora de la gestión de nuestros recursos, una aplicación de reducciones en los gastos superfluos y una mejora de la gestión recaudatoria en el polígono industrial”.

A esta iniciativa fiscal, que va a situar a Almussafes como población líder de la comarca con el coeficiente de IBI más bajo, se va a sumar una medida complementaria también para el próximo año consistente en la solicitud ante la Gerencia del Catastro de Valencia de la reducción automática de los valores catastrales de todos los inmuebles urbanos, industriales y de otros usos para el 2015. Esta acción supondrá, según fuentes municipales, una reducción del IBI en un 30%.

Según el artículo 32 de la Ley del Catastro, el ayuntamiento no podía pedir con anterioridad la actualización de esos valores, puesto que debían haber transcurrido al menos cinco años desde la entrada en vigor de los valores catastrales derivados del anterior procedimiento de valoración colectiva general, que en la localidad se aplicó en el 2009. Al respecto ha informado reiteradamente la directora jurídica del consistorio municipal tras los contactos mantenidos con el Departamento de Gestión Tributaria de la Dirección General del Catastro de Valencia. Por ello, desde el equipo de gobierno se critica la actitud tan irresponsable y desinformada del grupo municipal socialista en la oposición, “que públicamente ha aprovechado para pedir una revisión de la actual ponencia de valores durante todo el año 2014, sabiendo que legalmente era imposible, en una clara intención de ganar los votos de los contribuyentes”.

Medidas aplicadas desde el 2009

Tras la solicitud remitida a la Gerencia del Catastro por la anterior presidenta de la corporación, Mª Ángeles Lorente, el 30 de noviembre de 2005, para que este organismo procediera a revisar los valores catastrales vigentes desde el año 1994 en la localidad, la Dirección General del Catastro incluyó a Almussafes en el Plan de Trabajos del Catastro Urbano 2007-2009 para la realización de un procedimiento de valoración colectiva que culminó con la determinación de los nuevos valores catastrales, a efectos tributarios referidos a 1 de enero de 2009.

La valoración general de todos los inmuebles urbanos, tanto industriales, como residenciales, comerciales y de otros usos, se realizó durante este año 2008, mediante la adecuación de los valores catastrales de 1994 a los cambios experimentados hasta esa fecha, con el consiguiente incremento de los precios en el mercado, puesto que se aplicaron los valores de mercado del suelo y de los inmuebles de dos años de bonanza económica y de crecimiento exponencial de la especulación inmobiliaria. En ese momento, el gobierno municipal ya estaba en manos del BLOC-PP, que obligatoriamente asumieron la citada revisión catastral, “solicitada específicamente desde el partido socialista durante su período de gobierno con el objetivo de recaudar más ingresos”, explica el alcalde y concejal de Hacienda.

Dado que considerábamos injusta la medida puesto que los nuevos valores se aplicaban en plena crisis económica y de clara caída del mercado inmobiliario, desde el primer momento minimizamos al máximo sus efectos en los bolsillos de los ciudadanos, gestionando en su día con la dirección general del catastro una ponencia de valores mínima, además de conseguir que la aplicación de los nuevos valores catastrales se realizase de manera paulatina, incrementando desde 2009 y hasta 2018 un 10% cada año.

Con el objetivo de reducir todavía más la subida de los precios de los recibos de los contribuyentes, desde el equipo de gobierno se complementó esa medida con la reducción del tipo impositivo de manera anual. Del 0’70 en el 2009 al 0’52% en el 2013 y al 0’42% en el 2014. “En este momento, este es el mejor mecanismo a nuestro alcance, ya que beneficia directamente y de manera automática a todos los inmuebles del casco urbano”, añade Girona.

Reducción de la plusvalía

Para el próximo ejercicio fiscal, el Consistorio de Almussafes también va a aplicar una reducción de la cuota del impuesto sobre el incremento del valor de los terrenos de naturaleza urbana, conocido como plusvalía. Si durante el año 2013, la cuota de este impuesto era la resultante de la aplicación a la base imponible un tipo del 27%, el próximo año el tipo será del 15%.