Almussafes se protege instalando 6 desfibriladores semiautomáticos en distintos espacios públicos

El pasado jueves 5 de noviembre, se instalaron seis desfibriladores semiautomáticos en diferentes edificios públicos de Almussafes. De esta forma, el Ayuntamiento continúa con su objetivo de ampliar el número de espacios cardioprotegidos a disposición de la ciudadanía, dado que la red se ha ampliado para abarcar un mayor número de infraestructuras y, en consecuencia, para estar disponible para una mayor cantidad de personas. Los dispositivos están operativos en la casa consistorial, el centro cultural, el pabellón polideportivo, las piscinas, el campo de fútbol y la Policía Local, este último en versión portátil para poder desplazarlo al lugar en el que se presente la emergencia. “Estas nuevas herramientas, más modernas que las que teníamos en funcionamiento hasta ahora, superan ampliamente las exigencias establecidas en la nueva normativa aprobada por la Generalitat Valenciana para este tipo de servicios, una prueba más de nuestra apuesta por continuar avanzando en la creación de espacios cardioprotegidos, gracias a los cuales podemos salvar vidas”, señala la primera teniente de alcalde, Davinia Calayud

El Ayuntamiento de Almussafes continúa adelante con la instalación de desfibriladores en los edificios públicos con una mayor afluencia de personas. El ejecutivo municipal ha firmado recientemente un nuevo contrato mediante el cual se han instalado un total de seis dispositivos autónomos en distintos puntos del núcleo urbano, ampliando así la red existente hasta ahora. En concreto, se han colocado cinco fijos en la casa consistorial, el centro cultural, el pabellón polideportivo, las piscinas y el campo de fútbol, mientras que la Policía Local seguirá contando con uno portátil para atender las emergencias que puedan surgir en cualquier lugar de la población.

Todos ellos cuentan con un sistema de intercomunicación ininterrumpida las 24 horas del día y los 365 días del año con el objetivo de permitir su control, manteniéndose en todo momento operativos para garantizar su utilización durante toda su vida útil. La primera teniente de alcalde, Davinia Calatyud, destaca que “estas nuevas herramientas, más modernas que las que teníamos en funcionamiento hasta ahora, superan ampliamente las exigencias establecidas en la nueva normativa aprobada por la Generalitat Valenciana para este tipo de servicios, una prueba más de nuestra apuesta por continuar avanzando en la creación de espacios cardioprotegidos, gracias a los cuales podemos salvar vidas”.

La instalación, que se llevó a cabo el pasado jueves 5 de noviembre, ha incluido la colocación de sendos carteles en los que se explica cómo deben utilizarse estos aparatos, que se engloban dentro de los denominados desfibriladores semiautomáticos externos. Así, según el protocolo, lo primero que hay que hacer es llamar al 112 avisando del suceso. Posteriormente, debe iniciarse la reanimación cardiopulmonar y, a continuación, encender el desfibrilador, que a través de una grabación automática va explicando las instrucciones a seguir. “Gracias a la tecnología podemos convertir una desgracia en un susto y precisamente por eso vale la pena seguir invirtiendo en este tipo de proyectos”, comenta Calatayud

Junto con este reimpulso al programa, el Ayuntamiento desarrollará en las próximas semanas una serie de sesiones formativas en las que enseñará a utilizar los nuevos desfibriladores a alrededor de 48 personas, entre las que se encontrarán gran parte de la plantilla de la Policía Local y trabajadores y trabajadoras de los distintos departamentos municipales. “Hay que estar preparados por si se presenta una emergencia de este tipo, motivo por el que consideremos fundamental que el equipo de empleados de la administración local conozca en profundidad el manejo de estos dispositivos”, concluye la edil.