Almussafes habilita un espacio para los discapacitados físicos en el salón de actos del centro cultural
El consistorio municipal inicia los trabajos de acondicionamiento de la parte trasera del patio de butacas para destinarla al colectivo de personas con movilidad reducida. El Ayuntamiento también aprovecha el mes de agosto para realizar tareas de mantenimiento y limpieza en el recinto.
Almussafes continúa adaptando todas sus infraestructuras a las necesidades concretas del colectivo de discapacitados. Tras el análisis realizado por parte de los técnicos municipales para establecer el mejor emplazamiento y la consiguiente aprobación por parte de la corporación, la Concejalía de Cultura ha comenzado las gestiones pertinentes para poder disponer de un espacio destinado expresamente a personas con movilidad reducida y a los carros de bebés. La intervención, cuyo resultado estará disponible con el inicio de la nueva temporada de actividades, incluye la instalación de una rampa adaptada a la Ley de Accesibilidad.
Con la normativa actual, y con el objetivo de facilitar la salida de los espectadores en caso de emergencia, no es posible situar a estas personas en los pasillos del local, por lo que esta actuación resuelve de manera efectiva y legal la problemática existente. El lugar elegido para la habilitación de las citadas localidades ha sido la parte trasera del patio de butacas, justo delante del espacio ocupado por los técnicos de sonido e iluminación que coordinan los distintos espectáculos celebrados en este equipamiento. El actual equipo de gobierno comienza de esta forma a desarrollar su proyecto de accesibilidad, que contempla diversas actuaciones concretas en todo el casco urbano y que contribuirán a facilitar el tránsito de este colectivo por el municipio.
Por otra parte, aprovechando la ausencia de actividades en dicho salón de actos durante los meses de julio y agosto, la empresa concesionaria del servicio de limpieza del edificio está llevando a cabo tareas de desinfección del local con el objetivo de eliminar la suciedad que no es posible quitar en la limpieza diaria.