Casanova renuncia a la paga de Navidad junto a los dos ediles liberados, recorta las asignaciones al resto de corporación y destina los fondos a Emergencia Social
El primer edil defiende que la población “no entendería que la clase política se mantuviera al margen de medidas tan restrictivas como las aplicadas por Rajoy a los empleados públicos”
“Los miembros de la corporación municipal somos unos empleados públicos más, unos servidores que tampoco cobrarán la paga extraordinaria de Navidad que el Gobierno central ha decidido eliminar en aplicación del Real Decreto-ley 20/2012”. Vicente Casanova, alcalde de Almassora, ha anunciado su intención de renunciar al cobro de esta asignación que también será de aplicación a los dos ediles con dedicación exclusiva en el consistorio, Luis Martínez y Enrique Brisach.
Una medida asumida “porque no podemos estar pidiendo sacrificios a los funcionarios y no comulgar nosotros con el ejemplo”. La renuncia a estos emolumentos supondrá para el Ayuntamiento de Almassora un ahorro al que el consistorio sumará el recorte en las asignaciones al resto de miembros de la corporación por asistencias a órganos colegiados municipales. En este caso, ha señalado el primer edil, la medida comportará una rebaja del 7,1% en cómputo anual, por lo que al aplicarse solo a los meses comprendidos entre agosto y diciembre las retribuciones por asistencias a plenos, junta de gobierno, junta de portavoces y comisiones informativas se reducirán en estos meses un 17,1%.
“En todos los casos, estamos hablando de importes brutos que se reducirán a partir del próximo mes de agosto y hasta el próximo diciembre para los concejales que no tienen dedicación exclusiva, es decir, para 18 de los 21 ediles que conforman la corporación”, ha señalado el primer edil de Almassora.
El ahorro para las arcas municipales entre esta suma y la derivada de la renuncia a las pagas extras del alcalde y los dos ediles liberados se situará en unos 24.410 euros brutos. Una cuantía que, en prácticamente un 90% afectará a los miembros del equipo de gobierno, como miembros de la Junta de Gobierno, con un mínimo impacto para el resto de grupos de la corporación, PSPV y Bloc. “La suma irá destinada a atender las necesidades derivadas de los fondos de Emergencia Social, una cartera que el pasado 5 de julio el Ayuntamiento de Almassora ya amplió con 50.000euros más a los que ahora se sumará esta nueva inyección económica”, ha puntualizado el primer edil.
El alcalde ha dado a conocer estas medidas a los portavoces de los grupos de la oposición en el seno de una junta de portavoces celebrada este mediodía con carácter extraordinario y urgente.
Puesto que las remuneraciones fueron acordadas por unanimidad al inicio del mandato por los tres grupos políticos municipales -PP, PSPV y Bloc-, el alcalde ha celebrado esta sesión al objeto de presentar la propuesta y, posteriormente, llevarla al próximo pleno para su aprobación, esperando contar también con la unanimidad de todos los ediles de la corporación.
Cabe indicar que estas cuantías se suman a la reducción de 2.000 euros en concepto de asignación a cada grupo político que el pleno aprobó el pasado 14 de marzo. Una medida aplicada “por responsabilidad y rigor” y a la que ahora se incorpora esta nueva resolución.
Sin vehículo oficial
El recorte de gastos aplicado por el Ayuntamiento de Almassora se ha nutrido, a lo largo del año, de otras medidas que ya son efectivas. Así, el consistorio se ha desprendido del vehículo oficial durante el primer semestre del año, además de renunciar a la práctica totalidad de plazas de estacionamiento que los miembros de la corporación disfrutaban en el aparcamiento subterráneo.
Asimismo, se ha reducido el gasto telefónico con un uso limitado a teléfonos móviles. De igual modo, el consistorio ha procedido a congelar su plantilla durante el primer semestre, ampliar el horario laboral de sus trabajadores y ahorrar en gastos de personal 575.729,55 euros. Una suma relevante a la que el equipo de gobierno del Partido Popular ha incorporado un recorte en el capítulo de gastos corrientes que alcanza los 478.428,44 euros gracias a la revisión de contratos o la reconsideración de actividades y/o servicios evitables.
“La Administración pública se ha de regir por unos criterios de gestión y control, como los de cualquier empresa privada”. En opinión del primer edil de Almassora, “no solo hemos de exigirnos los sacrificios que se imponen al resto de ciudadanía, sino además ser ejemplares y aplicar modelos de gestión que permitan que la administración local funcione con eficacia y eficiencia, porque el dinero que administramos es el de todos”.