Almassora instalará bolardos en la calle Cervantes para limitar el acceso a la vía tras semipeatonalizarla
La medida permitirá reducir el flujo de la circulación y reforzar su uso peatonal
El equipamiento se completará con la plantación de árboles y otras dotaciones “que pretenden conferir un carácter más humano a esta calle y permitir que ciudadanos y residentes utilicen el entorno como punto de confluencia y reunión, ganando espacios al tráfico rodado”, ha considerado el titular de la cartera municipal. “Esperamos, como así ya nos lo han transmitido muchos vecinos, que el nuevo carácter que ha otorgado a la vía el diseño definido por los técnicos del área de Urbanismo permitan a los residentes disfrutar de esta calle”.
El departamento que dirige Brisach también procederá esta semana a instalar bolardos en la calle Santa Ana para delimitar el espacio de los peatones y ganar en seguridad para los ciudadanos. “De nuevo, primamos este carácter peatonal a las vías, si bien en Santa Ana el proyecto definido se ha centrado en la ampliación de aceras y colocación de arbolado, bancos y papeleras para consolidar, poco a poco, un carácter más humano a nuestra población”, ha señalado Brisach.
Ambas vías se han desarrollado con cargo a un proyecto definido por los técnicos municipales del área de Urbanismo y costeado con fondos municipales y una inyección económica aprobada por la Diputación Provincial. En definitiva, la inversión aprobada ha supuesto un desembolso total de 299.095,41 euros, ha concretado el regidor de Urbanismo. “La implantación del equipamiento permitirá”, tal y como ha considerado Brisach, “culminará una obra que desarrolló el último tramo de la cale l'Alcora y que ha permitido actuar asimismo en la calle Santa Ana y la calle Cervantes”.
