Almassora inicia los requerimientos para la protección de la totalidad de las terrazas exteriores
Según el nivel de riesgo de la instalación, los propietarios dispondrán de todo 2016 para el acondicionamiento
Con las primeras solicitudes de renovación recibidas durante el año, el Ayuntamiento de Almassora ha puesto en marcha el protocolo que llevará a hacer obligatoria la protección de la terrazas de establecimientos hosteleros situadas sobre las vía pública. Junto con la documentación de la renovación de la licencia, el consistorio remite a los propietarios las instrucciones para proceder a la instalación de elementos tales como pilones u horquillas metálicas y establece los plazos para la adecuación, que deberá estar finalizada antes del 31 de diciembre de 2016.
El Ayuntamiento de Almassora ha marcado este plazo para las terrazas que la Policía Local ha calificado de nivel de riesgo bajo, que dispondrán de todo el año para realizar las obras. En caso contrario, no podrán renovar su licencia de en 2017. No obstante, en aquellos locales cuyas instalaciones exteriores hayan sido etiquetadas como de nivel de riesgo alto, la protección deberá realizarse de manera inmediata para obtener la renovación del permiso municipal este mismo año.
El edil del área de Actividades, Roger Beltrán, ha explicado que “gracias estas medidas, propietarios y usuarios podrán seguir disfrutando de las terrazas con total tranquilidad”. El concejal ha añadido que dichas instalaciones “son muy importantes para el sector hostelero local porque aumentan la afluencia de clientes, por lo que el Ayuntamiento quiere asegurar su continuidad y que a finales de año el 100 % de la terrazas cumplan con la normativa”. En esta misma línea se ha manifestado el edil de Seguridad, Santiago Agustí, quien ha explicado que la Policía Local “ha realizado una intensa labor de inspección a fin de estudiar los riesgos y buscar soluciones que resulten sencillas y satisfactorias para todos”.
Según el procedimiento aprobado por la administración local, antes de la realización de cualquier obra, los propietarios deberán dirigirse al Ayuntamiento para solicitar la correspondiente autorización y realizar un depósito de 100 euros para garantizar que no se producen desperfectos sobre el asfalto. Si en el futuro, los hosteleros deciden cesar la actividad de la terraza, el Ayuntamiento les reintegrará dicha fianza una vez retiren las protecciones instaladas.
El consistorio calcula que cerca de 90 bares y restaurantes de la localidad cuentan con una terraza exterior, cuya autorización deberá ser tramitada durante el presente ejercicio. Durante el pasado año, cerca de 24 recibieron una notificación municipal para estudiar la protección de la instalación. El equipo de gobierno confía en que con esta nueva medida la totalidad de los locales queden adaptados a final de año.
