ALICANTE | SUCESOS

Pierde el móvil y la cartera tras una noche de fiesta y se inventa un robo violento en la playa de San Vicente del Raspeig

ELPERIODIC.COM - 26/02/2024

Denunció que le habían rodeado entre cinco o seis personas en "una zona donde salen los clientes a airearse, dormir y vomitar"

Agentes de la Policía Nacional han detenido en la localidad de Alicante a un varón por simulación de delito. El detenido interpuso una denuncia como víctima de un robo con violencia, cuando en realidad había perdido su teléfono móvil y su cartera. Posteriormente, puso una nueva denuncia, manifestando que había recuperado su cartera por la zona donde dijo haber sido asaltado, y su teléfono móvil en las dependencias de la Guardia Civil de San Vicente del Raspeig, donde un ciudadano lo entregó de forma voluntaria tras encontrárselo tirado en el suelo cerca del mismo lugar del supuesto robo.

Los hechos fueron investigados por el Grupo II de Policía Judicial de la Comisaría de Policía Nacional de Alicante-Norte, tras tener conocimiento de una denuncia interpuesta por un ciudadano que manifestaba haber sido víctima de un delito de robo con violencia.

El ciudadano, manifestaba que había estado en un local de ocio de la zona de San Juan playa y tras encontrarse mal, salió fuera del establecimiento a tomar el aire.

Al momento, el denunciante dijo que sintió cómo alguien le sustraía del bolsillo de su pantalón sus pertenencias y le preguntaba si llevaba algo más encima, dándose la vuelta y viendo que estaba rodeado por entre cinco o seis personas, por lo que intentó marcharse, siendo agredido en esos momentos por sus asaltantes para conseguir finalmente robarle con violencia su teléfono móvil y su cartera con documentación y dinero.

Así fue cómo relató los hechos la presunta víctima del robo, sin embargo, según descubrieron los agentes, nada de eso tenía que ver con la realidad.

A esta denuncia, el ciudadano amplió una nueva puesto que dijo haber recuperado su cartera tras dar una vuelta por el lugar del presunto robo con una amiga suya y localizarla por la zona por donde ocurrieron los hechos, la cual, según dijo, no tenía dinero en su interior que dijo que llevaba en su denuncia inicial, 30 euros en cuestión. En cuanto al terminal telefónico también declaró haberlo recuperado, en este caso, en las Dependencias de la Guardia Civil de San Vicente del Raspeig.

Según parece, el denunciante, activó el sistema de localización del teléfono móvil y le dio como posicionamiento la ubicación de las instalaciones del benemérito cuerpo, por lo que se dirigió hasta allí, donde le hicieron entrega del mismo.

Los investigadores, tras ponerse en contacto con los agentes de la Guardia Civil con el fin de averiguar el modo en el que había aparecido el teléfono, descubrieron que un ciudadano que residía en esa localidad, de forma voluntaria, lo había entregado allí después de encontrárselo en vía pública.

Según manifestaciones de este noble ciudadano, quien a la sazón trabajaba en el mismo establecimiento donde el denunciante había estado antes de sufrir el supuesto ilícito, cuando salió del local para tirar la basura, encontró el teléfono móvil tirado en el suelo fuera del establecimiento, concretamente en una zona donde suelen ir a “airearse” los clientes que se encuentran en estado de embriaguez, dormidos, vomitando o descansando, motivo por el que lo hizo llegar al cuartel de la Guardia Civil de la localidad donde reside.

Así las cosas, los agentes, tras recabar todos estos datos, volvieron a citar al denunciante con el fin de esclarecer los hechos, resultando que el ciudadano manifestó que en realidad los hechos no habían sucedido tal y como denunció inicialmente, sino que, tras encontrarse mal por haber ingerido alcohol, salió fuera del establecimiento a que le diera el aire y más tarde, sin saber cómo debió ser, se dio cuenta de que le faltaba su cartera y su teléfono móvil, decidiendo interponer la denuncia en esos términos pensando que así sí que se iba a investigar y le resultaría más fácil renovar su documentación.

Finalmente, tras esta nueva declaración, los agentes le detuvieron y le imputaron una simulación de delito, al haber denunciado unos hechos en la zona de San Juan playa de Alicante que no habían ocurrido en modo alguno como relató.

El detenido, un varón de 21 años de edad, de nacionalidad peruana, fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción de guardia de la misma localidad.

Denunciar ser víctima de un delito que no ha ocurrido puede acarrear antecedentes al propio denunciante

Numerosas detenciones son producidas en la provincia de Alicante por este delito de simulación, tratándose en la mayoría de los casos de denuncias presentadas por robos, cuando en realidad, o bien se trata de hurtos o extravíos, o bien los denunciantes aseguran ser víctimas de un robo con violencia para beneficiarse de la indemnización del seguro o justificarse ante terceras personas tratando de ocultar otro hecho.

Los hechos denunciados son investigados, por lo que, de determinarse la falsedad de los mismos, el denunciante acabaría siendo detenido como presunto autor de un delito de simulación de delito e incluso podría ser acusado de un delito de estafa en algunos casos, generándole antecedentes policiales así como penales, que les pueden traer graves repercusiones al normal desarrollo de su vida personal.