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El GMS denuncia la precariedad en la que se encuentra la red de bibliotecas municipales

    “Lamentamos profundamente que el concejal de cultura del partido popular venda humo una vez más. En Alicante a 14 de marzo de 2012, simple y llanamente seguimos sin cumplir la ley, en materia de bibliotecas”, afirma tajante la concejala Ana Paula Cid. “Nos parece una vergüenza que una capital como la ciudad de Alicante no disponga a estas alturas de una biblioteca en condiciones que actúe de centro coordinador y que tenga un mínimo de 600 metros cuadrados como marca la Ley 4/2011 de marzo de la Generalitat”.

    Según la concejala socialista, con toda la red de bibliotecas de la ciudad de Alicante no llegamos a medio libro por habitante, “esto es el resultado de una nefasta política en materia de bibliotecas en Alicante, desde hace años. Tenemos una red de bibliotecas precaria y decimonónica, porque no se trata solo de tener libros, sino de dotar adecuadamente nuestras bibliotecas para que den servicios propios del siglo XXI, con los requerimientos que marcan las nuevas tecnologías y los usuarios del siglo XXI”, mantiene la concejala Cid.

    Para la Edil del GMS, del anuncio del cierre de bibliotecas, resulta especialmente preocupante el de La Rotonda que, debería considerarse una “agencia de lectura”, según los requisitos contemplados en la Ley -aclara la Concejala Socialista- “esta cumplía un papel social y educador muy importante en una zona con grandes necesidades. Por eso, proponemos que se valore mantener este recurso por su función social”.

    “El cierre de la biblioteca de Padre Mariana es la crónica de una muerte anunciada, fruto de malas decisiones -afirma Ana Paula Cid- Era una biblioteca mal concebida, oculta en un segundo piso y en un centro de recursos educativos que, tras menos de cuatro años de funcionamiento, echa el cierre”.

    “Mucho ruido y pocas nueces” resume la concejala Cid, quien considera que esta situación es resultado de la descoordinación y de una política cultural y educativa errática y de continua improvisación por parte de la Alcaldesa y su equipo de gobierno en la Ciudad de Alicante.

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