Alicante planifica la construcción de tres nuevos parques inundables y 12 depósitos anticontaminación
El Ayuntamiento y Aguas de Alicante diseñan una red de instalaciones antirriadas que palíen los efectos de las lluvias torrenciales, tras los buenos resultados obtenidos con La Marjal y el tanque de San Gabriel
"Hemos sido pioneros en el desarrollo de infraestructuras de captación que protegen los alicantinos y minimizan riesgos ante lluvias torrenciales y vamos a crear una red que cubra las zonas sensibles de la ciudad”, destaca Barcala
El Ayuntamiento de Alicante avanza en su estrategia de instalación de infraestructuras antirriadas que permitan paliar los efectos de posibles episodios de lluvias torrenciales. En el marco de la Mesa técnica de evaluación de riesgos para emergencias climáticas, el Consistorio y Aguas de Alicante han puesto sobre la mesa los proyectos de nuevas infraestructuras en los que trabajan de forma conjunta, dentro del proyecto 'Alicante Circular'. Siguiendo el ejemplo del parque inundable La Marjal y el depósito anticontaminación y de contención de San Gabriel, se han planificado nuevas infraestructuras para laminar los episodios de lluvia y de nuevos tanques. En concreto, se prevé la construcción de tres nuevos parques inundables y 12 depósitos anticontaminación y de retención.
"Nuestro objetivo es proteger a los alicantinos y minimizar los riesgos que llevan aparejadas las lluvias torrenciales”, explica el alcalde, Luis Barcala, que añade que “la ejecución de infraestructuras de captación y depósito, en las que Alicante ha sido pionera y que han recibido reconocimiento internacional, ha demostrado ser una medida preventiva eficaz y sostenible, en la que vamos a seguir trabajando hasta desarrollar una red de depósitos que cubra las zonas más sensibles de la ciudad”.
Las infraestructuras, que se integrarán en el nuevo PGOU, se basan en la experiencia positiva de las instalaciones preexistentes, que constituyen un referente en la optimización de la gestión de las aguas pluviales mediante soluciones basadas en la naturaleza, y su éxito en la protección de la zona urbana circundante, su integración en la trama urbana, y la amplia función social asociada.
Nuevas instalaciones
Entre los futuros parques inundables previstos se encuentran un parque urbano Vía Parque-Teulada, un parque urbano en la cabecera del barranco San Blas, en el entorno del Parque Central y un parque urbano inundable de la avenida de Elche, junto a Casa Mediterráneo.
En cuanto a los depósitos, hay una previsión de 12 nuevos, que tendrán una capacidad total de 150.000 metros cúbicos, distribuidos en puntos sensibles de la ciudad, y que servirán de contención y minorarán los riesgos de contaminación asociados a alivios puntuales en playas, barrancos y litoral costero destacando los del Cocó, Palmeral, La Albufereta, Condomina y zona baja de San Gabriel en el entorno Paseo Joan Fuster.
Todo ello se complementa con una red de telemandos en la red de colectores para la supervisión y control con elementos que permiten actuar en tiempo real sobre los caudales de agua en la red de drenaje, instalados y controlados por la empresa concesionaria del servicio, Aguas de Alicante.
Además, en la actualidad se está desarrollando diversas actuaciones en el ámbito de la playa de la Almadraba que, aparte de renaturalizar el entorno de la zona, incluyen diversos elementos de drenaje y depósitos de retención, que mitigan los problemas de inundabilidad de la zona.
El pasado 8 de noviembre se constituyó la Mesa técnica de evaluación de riesgos para emergencias climáticas, presidida por el alcalde, Luis Barcala, e integrada por las áreas de Medioambiente, Seguridad, Urbanismo y Partidas Rurales, además de Protección Civil, la Mancomunidad de L’Alacantí y Aguas Municipalizadas de Alicante. Entre sus objetivos más inmediatos se encuentran la evaluación del estado y desarrollo de un plan de limpieza de las infraestructuras, ramblas, barrancos y cauces de las cuencas implicadas; la evaluación de las zonas inundables del término municipal, con análisis específico y erradicación de los asentamientos irregulares; y el desarrollo de un plan de divulgación de medidas preventivas y de los protocolos de actuación a la población.
Infraestructuras y canalizaciones ejecutadas
La ciudad de Alicante cuenta actualmente con dos grandes infraestructuras hidráulicas, que son el depósito anticontaminación del barrio de San Gabriel, con una capacidad de 60.000 m³ y que supuso una inversión de 15 millones de euros, y el Parque de La Marjal, con capacidad para 45.000 m³ y una inversión de 3,3 millones de euros. Este parque se ha convertido en un referente nacional e internacional de ejecución de actuaciones hidráulicas contra el riesgo de inundación, compaginando la ingeniería con la sostenibilidad y el medio ambiente.
Estas dos infraestructuras se suman a la rede de colectores ejecutada dentro del plan antirriadas desarrollado entre 1997 y 2005, consistentes en la ejecución de grandes infraestructuras hidráulicas en el ámbito urbano Alicante y sus alrededores. Estas obras dotaron de capacidad a los colectores urbanos, mitigando las afecciones que lluvias de gran intensidad comprendiendo casi 40 kilómetros de canalizaciones nuevas, de las que 22 fueron canalizaciones a cielo abierto y 18 con canalizaciones enterradas de gran diámetro.
Las actuaciones más importantes fueron los colectores de San Agustín, Vía Parque, Oscar Esplá, Bulevar del Pla y Playa de San Juan, y el encauzamiento de los barrancos de Orgegia, Juncaret y Albufereta.
Supusieron una inversión de unos 175 millones de euros y se y se complementaron por otras realizadas por el Ayuntamiento de Alicante en diversos ámbitos de la ciudad, por 13 millones de euros.
Con posterioridad se han venido desarrollando y ejecutando nuevas infraestructuras de drenaje pasando a tener en el año 2023 una red de grandes colectores de 109 kilómetros, cuando en 1997 era de 42.
Alicante dispone de más de 700 kilómetros de redes de alcantarillado entre las que se encuentran grandes colectores de transporte de aguas pluviales que, junto a las más de 20.000 captaciones de agua de lluvia, contribuyen a la mitigación de inundaciones y gestión del agua de escorrentía superficial, protección de infraestructuras y mejora de la movilidad urbana, protección de la salud pública y protección de la seguridad ciudadana ante eventos de lluvia intensa.