El GMS se adhiere al manifiesto ciudadano que aboga por mantener la atención sanitaria a los inmigrantes en situación irregular
La Portavoz del GMS, Elena Martín, ha informado del acuerdo unánime de los concejales socialistas alicantinos para adherirse al manifiesto promovido por Carlos Gómez Gil, profesor de la Universidad de Alicante y Director del Observatorio Permanente de la Inmigración y Ramón Castejón Bolea, Investigador en Salud e Inmigración en la UMH.
Según la Portavoz Socialista, las medidas anunciadas, que recortan derechos a las personas inmigrantes, no solo suponen una discriminación inmoral y conllevan un riesgo sanitario para el conjunto de la sociedad, sino que constituyen una burda maniobra de distracción hacia los ciudadanos, a quienes se quiere hacer partícipes de la actitud insolidaria del Gobierno del PP, cargando la culpa de sus desmanes y su mala gestión en los más vulnerables “El PP pretende convertir a los inmigrantes en el chivo expiatorio para ocultar su nefasta gestión -afirma Martín- ya intentaron hacernos creer que todos éramos culpables de la crisis para que nos resignáramos a sus recortes y ahora quieren hacernos cómplices de una política insolidaria que restringe derechos básicos de las personas”
La Portavoz socialista coincide con los promotores del manifiesto en que las medidas anunciadas repercutirán seriamente en el funcionamiento de las urgencias hospitalarias, además de suponer una “marcha atrás inconcebible” en la concepción de la salud pública y en las políticas preventivas en materia sanitaria. “La ciudadanía en su conjunto se verá perjudicada directamente por estas medidas, no solo en la calidad de los servicios sanitarios sino en el agravamiento o cronificación de las dolencias en muchas personas y en la mayor exposición social a las enfermedades infecciosas, debido a la exclusión de la atención primaria y la medicina preventiva de una parte de nuestros conciudadanos”
“Nos exponemos al deterioro de la salud general y también al deterioro moral de nuestra sociedad. Porque estas medidas son profundamente injustas, irresponsables y no supondrán el ahorro que supuestamente se persigue. No tendremos más salud, no tendremos más recursos y estaremos construyendo una sociedad más injusta e insolidaria que discrimina el derecho a la salud de las personas.” Concluye la Portavoz Socialista.