ALFONDEGUILLA | SOCIEDAD

La Pasión de Alfondeguilla cumple 20 años y marca el inicio de la Semana Santa

ROSA PIQUER - 18/03/2024

Los protagonistas son un grupo de aficionados que año tras año transforman Alfondeguilla en Jerusalén para revivir los misterios de la pasión de Jesucristo

El grupo de teatro Mans Obertes de Alfondeguilla ultima los detalles de la Pasión que se celebrará este sábado 23 de marzo a partir de las 22:30 horas.

Este año, la Pasión de Alfondeguilla cumple 20 años y se convierte en una de las citas obligadas para vecinos y visitantes que recorren todas las escenas, desde la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén, el Sanedrín y la traición de Judas, el monte de los olivos, la escena  de Jesús ante Poncio Pilatos y la subida al Calvario donde finalmente es crucificado.

De esta manera Alfondeguilla se convierte en Jerusalén. Se apagan las luces de las calles por donde transcurre la Pasión, y a su paso, con las luces de las calles apagadas, solo las antorchas iluminan las escenas de los misterios de la pasión de Jesús.

Todo ello en un entorno natural. De hecho, la escena del monte de los olivos se desarrolla en plena naturaleza y la subida de Cristo con la Cruz camino del Calvario es en el auténtico Calvario de la localidad, emblema e imagen de Alfondeguilla. 

Mans Obertes cuida cada detalle en esta representación que este año cumple 20 años y que marca el inicio de la Semana Santa.

Las escenas de la Pasión

El pueblo que aclamaba a Jesús como Mesías, pero también los que después frente a Pilatos pidieron su crucifixión; el Sanedrín con la traición de Judas Iscariote; la última cena con el lavatorio de los pies mostrando a un Cristo que ha venido a este mundo en carne mortal a servir y no a ser servido; Getsemaní, con el monte de los olivos, donde Jesús fue capturado y llevado a Pilatos; la presentación de Jesús ante Caifás; el Pretorio donde Jesús fue llevado ante el procurador de Judea quien en una conversación de tú a tú con el Señor, deja en manos del pueblo la decisión de crucificarle, lavándose las manos, mostrándose así como inocente de la muerte de Jesús; la subida al Calvario donde, un Vía Crucis en el que obligan a Simón de Cirene a cargar la Cruz de Jesús hasta el Gólgota en un camino en el que el Redentor se encuentra con su Madre, María, que se encontraba junto a María Magdalena y el discípulo amado, San Juan; y la Verónica que enjuga el rostro de Jesús.

Y así, entre el sonido de los tambores, introducen a los presentes, que aguardan en las calzadas del Calvario, en el suplicio de Cristo que cae exhausto pero que pese a todo se levanta y continúa hacia lo alto del Calvario de Alfondeguilla para cumplir la voluntad del Padre. 

Arriba le esperan dos ladrones crucificados, uno a su derecha y otro a su izquierda, como señala el Evangelio. Mientras uno de ellos, más conocido como el ‘mal ladrón’ le recrimina a Jesús que siendo el Rey de los Judíos no se salva, el ‘buen ladrón’ le pide a Cristo que se acuerde de él cuando llegue a su reino.

Tras pedir al Padre que perdone a los que están ejecutándole a muerte, a la hora de nona, e indicar que “todo está cumplido”, Jesús muere en la Cruz. En ese momento, el Calvario de Alfondeguilla resuena la destrucción del templo, todo se vuelve oscuro. El Hijo de Dios ha muerto.

Posteriormente, sus discípulos bajan al Crucificado, que es entregado a los brazos de su Madre, quien desde entonces es Madre nuestra. Es la viva imagen de la Piedad. Jesús yace ya en el suelo, apoyado en María su madre.

Tras enrollar el cuerpo de Jesús en el sudario, sus discípulos se llevan el cuerpo que poco después, en lo alto, frente a la ermita del Calvario, Cristo aparece Resucitado, el momento culmen de la Pasión de Alfondeguilla, entre cantos de Aleluya y fuegos artificiales. Cristo ha vencido a la muerte, asciende al cielo, a la derecha del Padre.