Ha comenzado la XXXV Olimpiada Matemática de la Comunitat Valenciana en el IES L’Arabí de l’Alfàs
Este fin de semana se han dado cita, en el IES L’Arabí de l’Alfàs del Pi, alrededor de 200 estudiantes de diferentes centros educativos de la Marina Alta y Baixa, clasificados por grupos y edades en tres ciclos, para participar en la trigésimo quinta edición de la Olimpiada Matemática, convocada por la Sociedad de Educación Matemática de la Comunitat Valenciana Alkhuwarizmi.
L’Alfàs es una de las seis sedes de esta primera fase comarcal, junto a Dénia, Mutxamel, Petrer, Elche y Torrevieja y la concejala de Educación, Laura Sevilla, ha querido acercarse hasta el recinto escolar para desear lo mejor a estos chicos y chicas, que han tenido que superar unas pruebas selectivas para poder concurrir, “y por lo tanto merecen nuestra felicitación por adelantado, y ganar pasa a ser secundario, aunque deseo que ganen los y las mejores”, ha manifestado la concejala alfasina, que igualmente ha querido felicitar “al equipo directivo y profesorado del IES L’Arabí, por su implicación en esta ingeniosa competición, desde el minuto cero, hace nada más y nada menos que 35 años”.
Se trata de una iniciativa de la Asociación de Profesores de Matemáticas como una fórmula eficaz de desmitificar la mala fama que acarrea la asignatura, y la divulgación de las matemáticas a través de la resolución de problemas. Participantes desde 5º de Primaria hasta 4º de ESO de diferentes centros de la Marina Alta y Baixa. 3 categorías diferentes y sólo 1 de cada ciclo llegará a participar en la fase final.
El denominador común para participar disponer de una buena dosis de conocimiento, pericia y lógica, además de participar sabiendo que esta Olimpiada es un juego, mucho más divertido de lo que podemos pensar desde el otro lado de la prueba.
Una Olimpiada que nació para desbaratar la idea generalizada de que las matemáticas son aburridas y complicadas. La carrera ha comenzado este fin de semana, y sus participantes son conscientes de que el mero hecho de competir es una experiencia que merece la pena, además de permitir hacer nuevas amistades y constatar que la vida es un juego.
