Alerta por frío extremo en la Comunitat hasta el viernes

La Dirección General de Protección Civil y Emergencias del Ministerio del Interior ha emitido una alerta por frío intenso en varias comunidades de España, entre ellas en la Comunitat Valenciana. Y es que según las predicciones de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) este jueves y viernes se pueden alcanzar los seis grados bajo cero en el interior de la Comunitat así como temperaturas negativas en el litoral de la provincia de Valencia.

Para este jueves se pueden registrar temperaturas muy bajas, de hasta 8 grados bajo cero en algunas localidades de la Comunitat. Según ha informado la Agencia Estatal de Meteorología, las temperaturas descenderán hasta - 7.9 ºC en Ademuz (Valencia); - 5.6 en Fredes, - 5.2 ºC en Vilafranca, - 5 ºC en Castellfort y - 4 ºC en Morella (Castellón). En cuanto a las capitales de provincia, pueden alcanzar los 2 ºC en Castellón, 2.5 ºC en València y 3 ºC en Alicante.

Así, para este jueves las temperaturas mínimas irán en descenso mientras que las máximas se mantendrán sin cambios con heladas en el interior, débiles en general.

Consejos ante el frío

Ante la previsión de bajas temperaturas y de nieve, desde Protección Civil recomiendan llevar cadenas o neumáticos de invierno, ir muy atento y tener especial cuidado con las placas de hielo. Además, debemos informarnos de la situación meteorológica y el estado de las carreteras. También es importante revisar el vehículo, los neumáticos, anticongelante y frenos.

Es útil llevar ropa de abrigo y un teléfono móvil con batería de recambio y/o cargador de automóvil. En caso de quedarse aislado y necesitar ayuda, recomiendan informar de este hecho y, salvo que la situación sea insostenible, espere asistencia.

También el Centro de Coordinación de Emergencias insiste en lanzar una serie de consejos a los Ayuntamientos, a quienes pide que se apliquen las medidas preventivas hacia la población más vulnerable que no pernocta bajo techo.

En casa, destacan que se deben tomar precauciones para evitar el envenenamiento producido por el uso de braseros o estufas de leña, carbón o gas en lugares cerrados sin renovación de aire. Además, inciden en la necesidad de ventilar periódicamente para renovar el aire, y de alejar a los niños de estufas y braseros.