Una empresa histórica lanza el ‘SOS’ desde la cuna del abanico arrasada por la Dana: “Lo destruyó todo como si fuera un castillo de naipes”

La cuna del abanico mundial llora tras la riada de la DANA en Aldaia, que ha arrasado con las históricas firmas que fabrican desde hace siglos este elemento para todo el planeta.

Y es que este municipio valenciano es la cuna mundial del producto y produce con el palmito más del 80% de los abanicos de toda España. De hecho, con el paso de los siglos Aldaia se ha convertido en la capital de este complemento, con un verdadero clúster de empresas de todo tipo, desde pintores a teladores o montadores históricos, que ahora se ven en serio riesgo de desaparecer por los desastres de la gota fría.

Es el caso de la Fábrica de Abanicos Andrés Pascual, una de las pocas fábricas artesanales de abanicos en España y con más de 140 años de historia, que ha sido gravemente afectada por la DANA.

Esta empresa familiar, que ha preservado la tradición abaniquera de la Comunitat Valenciana durante generaciones, se enfrenta ahora a su mayor reto: reconstruir su espacio y continuar su labor artesanal.

Una tradición en riesgo de desaparecer

Fundada en 1880, la Fábrica Andrés Pascual ha sido gestionada por varias generaciones de la familia, manteniendo viva una artesanía única y combinándola también con diseños modernos que han sido reconocidos internacionalmente.

La tormenta dejó daños devastadores en la infraestructura de la fábrica, afectando tanto a los talleres como a los materiales y herramientas que se utilizan para fabricar los abanicos, lo que ha llevado a un cierre temporal de la empresa.

“La DANA no solo golpeó las paredes y el mobiliario de nuestra fábrica, sino también nuestra ilusión de seguir adelante con el proyecto de vida que heredamos de nuestros antepasados,” explica uno de los dueños.

Ayuda para que no se pierda esta tradición valenciana

En un esfuerzo por reponerse de los daños, la familia Andrés Pascual ha lanzado una campaña de crowdfunding en GoFundMe, buscando el apoyo de todos aquellos que aprecian la historia y la cultura de la región. A través de esta campaña, la fábrica espera recaudar los fondos necesarios para reconstruir las instalaciones y volver a abrir sus puertas.

Cada donación contribuirá a la restauración de un espacio único, permitiendo a la familia continuar con el legado artesanal y, con suerte, fortalecer la presencia de este patrimonio cultural en la Comunitat Valenciana.

“Con el apoyo de todos, esperamos que la Fábrica de Abanicos Andrés Pascual pueda seguir siendo un emblema de la artesanía valenciana,” explican, al tiempo que añaden que “cualquier cantidad, grande o pequeña, será de gran ayuda para que esta tradición centenaria pueda perdurar en el tiempo”.

“Nos gustaría continuar con nuestro trabajo y conseguir que el legado de nuestros mayores y la tradición de la fabricación de abanicos en Aldaia no se perdiera, pero para continuar necesitamos la ayuda, que nunca pensábamos que íbamos a tener que pedir”, han señalado.