Las políticas de juventud han sido uno de los ejes centrales de Compromís per Alboraia durante la legislatura 2015-2019
Desde Compromís las políticas de juventud han sido tan importantes durante la legislatura 2015-19, que la primera moción que se presentó fue una en que pedía que la corporación local se comprometiera a la elaboración de un plan de juventud (julio de 2015). Paralelamente a la moción se planteaba una amplia batería de propuestas. Una de ellas era volver a poner en marcha el Consejo local de juventud para recoger las iniciativas y las inquietudes de los más jóvenes. Entre las propuestas también destacaba poner en funcionamiento un punto de información juvenil (el que hoy es el Espacio Joven). Era mucho importando un Plan de primera ocupación gestionado entre la concejalía de juventud y la concejalía de desarrollo económico y la ADL.
Una de las reivindicaciones vecinales ha sido pedir espacios públicos y de ocio para jóvenes. Compromís en diferentes ocasiones ha hecho propuestas en este sentido, priorizando una programación continuada a lo largo del año por ante los grandes eventos, y donde espacios municipales pudieron ser aprovechados por los jóvenes (escuelas fuera del horario escolar).
Compromís propuso igualmente continuar con la formación/charlas en las escuelas sobre el tema de los problemas que puede plantear el uso de las redes. Desde Compromís señalan "Pero tenemos que ser positivos y también plantear charlas y formación sobre las cosas positivas que pueden aportar las redes (por ejemplo como pueden ayudar en la busca de trabajo o para canalizar iniciativas juveniles de diferentes tipos o por proyectos de micromecenazco)." Respecto a los grafitis desde Compromís comentan su propuesta "Grafitis: Esta cuestión tiene dos caras, por un lado está las molestias provocadas (que también se tiene que atender) y de otra está la cuestión de canalizar las manifestaciones artísticas de formas que no sean molestas. Se tendrían que buscar soluciones como un convenio de paredes o talleres de grafitis. Una posibilidad sería canalizar el tema (esas intervenciones) con convenios con entidades que tienen experiencia con este tema, como por ejemplo las universidades de la ciudad de Valencia. Sea como fuere, se podría hacer un concurso de ideas entre artistas del grafiti o de la pintura mural para intervenir en determinados puntos urbanos. Por un lado se evitaría la realización de grafitis incontrolados/no autorizados; se podrían hacer obras que tuvieron relación con los barrios o con el pueblo y que dieran una buena imagen. Por supuesto se tendría que tener en cuenta a los vecinos porque serían los que tendrían la obra en su barrio o en su pared."