La Policía de Albal interviene 5.000 veces más que antes de irrumpir la pandemia
Actualmente Albal se sitúa en 251 casos de COVID-19 activos y 4 personas fallecidas por el virus
La Jefatura de la Policía Local del Ayuntamiento de Albal, ha presentado su memoria anual de 2.000 cuyos servicios llegaron a un total de 19.451, una cantidad que se incrementado sobremanera, respecto al ejercicio anterior, en hasta 5.265 actuaciones. Manuel Ocaña, Intendente Jefe del cuerpo, atribuye el aumento de actos de servicio público, “a la pandemia” y destaca la profesionalidad de sus agentes. En los mismos términos se ha expresado el alcalde Ramón Marí, que al ser conocedor de estos datos ha querido poner en valor el sobreesfuerzo de los agentes durante la crisis sanitaria, en su calidad de servidores públicos. Al tiempo, ha destacado la profesionalidad del Intendente-Jefe.
La prevención y la intervención son dos tareas fundamentales de este cuerpo, tal y como queda reflejado en el informe y suponen el 41% de las actuaciones, 7.819 de ellas, procedían de requerimientos relacionadas con la seguridad ciudadana, tanto directas como las realizadas a través del 112, Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat.
Más de 5.000 sanciones derivadas del Coronavirus
Albal ha realizado mucha pedagogía sobre la COVID-19, desde que se decretara el estado de alama. Todos los canales de información municipales han comunicado y continúan haciéndolo, de todas las medidas que se han de cumplir para evitar sanciones. A pesar de esto, la localidad ha tramitado 5.247 infracciones por diversos incumplimientos, un 27 % del total del trabajo anual.. LA COVID-19 suma 1.992, 1.897 a vehículos y 1.661 a personas controladas durante el estado de alarma y en períodos de restricciones horarias, con la imposición de 672 denuncias, tramitadas a la Delegación del Gobierno y a la consellería competente.
La pandemia reduce la movilidad y la siniestralidad
La COVID-19 ha restringido la movilidad y por ende las infracciones relacionadas con la seguridad vial, en Albal ha supuesto un 14% total del trabajo policial, fueron 2.684 las intervenciones realizadas en esta materia, 938 menos que en el año anterior. Se redactaron 57 atestados por delitos contra la seguridad del tráfico, 23 menos que el año anterior, se hicieron 94 controles de alcoholemia y drogas donde se practicaron 916 pruebas de alcoholemia y 14 de drogas.
Los delitos judiciales también crecen con la crisis
Los servicios relativos a policía judicial ascienden a los 883, con la instrucción de 142 diligencias por infracciones penales y 37 personas detenidas- 12 más que en 2019- y otras 28 investigadas por diversos delitos. “El aumento de las detenciones viene determinado por dos factores, por el delito de desobediencia en lo relativo a incumplimiento de las medidas COVID y por las llamadas de la ciudadanía ante hechos delictivos de todo tipo”, explica el Intendente-Jefe.
En cuanto a la atención prestada por esta policía a materias tan sensibles como la violencia de género, se prestaron 61 servicios con ocho personas detenidas y 73 servicios en violencia en el ámbito familiar y conflictos en dicho ámbito.
En materia de tráfico urbano, se tramitaron 535, cuya cifra desciende respecto al ejercicio anterior en 235. Se han tramitado 70 expedientes sancionadores a infracciones de la ordenanza de buen gobierno y tenencia de animales. Dicha Unidad ha remitido a la Delegación del Gobierno en la Comunidad Valenciana, 136 propuestas de sanción por desobediencia de la Ley de Protección de la Seguridad Ciudadana.
Cabe destacar la atención directa a la ciudadanía, con un total de 2.099 requerimientos vecinales directos que fueron atendidos y gestionados desde la policía local, 483 requerimiento más que en el 2019.
Relativo a menores, se actuó hasta en 1.729 ocasiones, con un descenso de 521 servicios, motivado por la ausencia de clases durante la pandemia, “después hemos seguido prestando seguridad y protección a la entrada y salida de los centros, evitando aglomeraciones, controlando el uso de la mascarilla y haciendo más seguras las entradas y salidas a los centros”, explica Ocaña. Debido a la ausencia de actos festivos, el cuerpo ha descendido el volumen de trabajo relacionado con el acompañamiento y seguridad de los mismos.
En cuanto a la asistencia por emergencias sanitarias y servicios humanitarios y sociales se personaron en 877.163 ocasiones, destacan los 522 servicios humanitarios y emergencias. Fueron requeridos 186 veces para ayudar a personas mayores que se encuentran solas en sus domicilios y sufrieron caídas, así como otras intervenciones de auxilio.